Ya son siete los años que han pasado desde el gol en doble fuera de juego que dejó al Málaga sin semifinales de la Champions League
En la ciudad costasoleña, la herida del escandaloso doble error que eliminó al Málaga de la Champions League no ha cicatrizado, ni lo hará. Este 9 de abril se cumplió siete años de una de las injusticias más grandes sufridas por un equipo en la historia del fútbol.
Los blanquiazules acabaron liderando su grupo. Panathinaikos, Zenit de San Petesburgo, AC Milan o FC Porto sucumbieron ante el conjunto de Pellegrini, que no perdió ni un solo encuentro como local en La Rosaleda. Y el sueño debió continuar.
Con el respaldo de 2.300 seguidores, Manuel Pellegrini presentó la siguiente alineación: Willy Caballero; Jesús Gámez, Demichelis, Sergio Sánchez, Antunes; Toulalan, Camacho; Joaquín, Duda, Isco: y Baptista. También jugaron Eliseu, Santa Cruz y Portillo.
Poco duró la ilusión de los alemanes. A los 25 minutos Joaquín inaugura el marcador con un precioso disparo. En el 39′ Lewandovski empata a pase de Reus. Se llega al descanso con 1-1.
El ‘Gigante de Europa’ en su época no dejó de meter miedo al equipo dirigido por Klopp y consiguió en el 82’ con un gol de Eliseu el 1-2. Todo se pone de cara…
Ya en el primer tiempo, el chirriante Thomson perdonaba a Bender la expulsión por dar una patada a Baptista. A los 61′ le perdona la segunda amarilla a Schmelzer por una clara falta sobre Gámez. Tampoco consideró otra falta salvaje de Subotic a Isco. Nada.
Lo que vino después avergonzaría a la UEFA para la historia. Una UEFA que siempre defendió los ”grandes” y no aceptó que un humilde equipo llegase a esas alturas de la élite europea.
A los 90′ llegó el gol de Reus tras una pérdida de Portillo. Y a los 92’, el escándalo. Cuatro jugadores del Borussia, en escandaloso fuera de juego. Santana remató en rotunda posición ilegal pero Thomson se hizo el tonto. Gol ilegal y bochornoso que eliminaba al Málaga de la manera más cruel.
Los afligidos aficionados malagueños todavía tuvieron que soportar el recochineo del dicharachero Klopp, comentando que la derrota malaguista era obvia de un equipo ”chico”.
Tras alcanzar la luz del cielo, el Málaga ha caído en picado en un pozo, en un infierno que les amenaza de su desaparición llegando a alcanzar los puestos de descenso de Segunda Division. Han pasado siete años, y la tecnología ha avanzado para el fútbol. El VAR ha aparecido, en cambio, la UEFA sigue escondiendo esta historia que escuece a miles de malagueños.
