Dark Light

Blog Post

Fútbol Histórico: Cruyff y los vascos

El Dream Team de Johan Cruyff estuvo plagado de futbolistas vascos, una utópica relación en la que Javier Clemente tuvo mucho que ver en la llegada del holandés al club blaugrana

Muchos se preguntan por qué en esa maravillosa época de Johan Cruyff, gran parte de la plantilla blaugrana estaba formada por jugadores vascos. Los equipos no podían tener a más de dos jugadores extranjeros sobre el césped, y el producto nacional era lo importante. Aun así en Can Barça las cosas eran un tanto peculiares. La pasada temporada había sido nefasta, con muchos conflictos internos, y el club, junto con la llegada del técnico holandés, se renovó por completo.

El motín del Hesperia

Nos encontramos en la temporada 1987/88. El Barça de Venables viene de no conseguir el título en la famosa liga del playoff. Tras varias decepciones consecutivas y una era de sequía empieza un nuevo año, pero no lo hace de la mejor forma. Malos resultados en los primeros partidos, y el técnico inglés es cesado. El sustituto es Luis Aragonés, y este elige a Carles Rexach como segundo.

El Sabio de Hortaleza no consigue hacer del Barça un equipo regular y pese a ser liderados por Schuster y Lineker (los dos extranjeros), el Madrid consigue sacarles hasta 23 puntos de distancia. La afición está descontenta ya que en Europa tampoco logran buenos resultados. Llegan a cuartos con problemas, y son eliminados por el Bayern Leverkusen, que ganará al Espanyol de Javier Clemente en la final.

Rueda de prensa en el hotel Hesperia
Fuente: Madrid-Barcelona.com

El único título que consiguen es la Copa del Rey jugada en el Bernabéu ante la Real Sociedad. No eran los favoritos – el equipo vasco goleó 5-0 al Madrid en semifinales – pero lograron vencer 1-0 gracias al tanto de Alexanko. Esa victoria dio confianza a los jugadores. Había mucha tensión entre los futbolistas y la directiva por problemas económicos desde el inicio de la temporada, y hartos de no ver soluciones, un 28 de abril se reunieron en el hotel Hesperia, curiosamente propiedad de Gaspart, y decidieron protestar ante los medios de comunicación.

Llegada de Cruyff y los vascos

La relación entre jugadores y directiva se rompió, y Núñez decidió hacer una limpieza total. Primero se marchó Luis Aragonés, y luego hicieron las maletas un total de 14 jugadores. Entre ellos Schuster (se marchó al Real Madrid), Urruti, Archibald (el escocés que se quedó sin plaza en el primer equipo) y Hughes entre otros. Tras eso tocó restructurar la plantilla. Solo se quedaron diez jugadores, y ficharon a 12.

Era un nuevo inicio para el club, y sin saberlo sería también el inicio de una de sus mejores épocas de la historia. Johan Cruyff formaría un equipo dominador a base del control del balón, la velocidad y la calidad individual. Para eso se necesitaban nuevos futbolistas, y en su primer año decidió contar con varios de los cerebros del motín, como Alexanko y Zubizarreta. Además también se quedaron al “Lobo” Carrasco, Lineker y Migueli entre otros. Pero aquí el tema va sobre los vascos, y es que llegó una plaga de jugadores que se unieron al mismo Alexanko, de Barakaldo, y Zubizarreta, el guardameta vitoriano.

Firma de Johan Cruyff en 1988
Fuente: Sport

Aun así la historia es rebuscada. Núñez debía reforzar una plantilla con un montón de bajas. Para ello tocaba buscar mucho en el mercado nacional, pues solo quedaba una plaza para un jugador extranjero. Y aquí es donde entra el papel del famoso Javier Clemente. El exjugador del Athletic entrenaba al Espanyol, y vivía en Barcelona. Daba la casualidad de que un vecino suyo trabajaba para el presidente blaugrana, y este les puso en contacto para hablar sobre la contratación de varios jugadores nacidos en Euskadi. Núñez le presentó una lista con varios nombres, y Clemente le afirmó que si los fichaba al club le iría bien.

Se oficializó la llegada de López Rekarte, José Maria Bakero, “Txiki” Beguiristain, Julio Salinas, Goikoetxea (navarro) y Juan Carlos Unzué. Ya eran un total de siete jugadores vascos en el Barcelona, y la prensa, enterada de la relación entre el técnico y el presidente, reconoció esos nombres como «la lista de Clemente». En ese momento también llegaron jugadores como el “Txingurri” Valverde (para muchos considerado vasco), recomendado por Clemente, Miquel Soler, Eusebio Sacristán y un extranjero, Aloisio, que no triunfó. Muchos de estos jugadores dejaron huella en el Barcelona o en el fútbol español. En conclusión, el equipo se había renovado completamente y se esperaba mucho.

Rekarte, Bakero y Beguiristain
Fuente: Mundo Deportivo

El inicio de Cruyff en el banquillo fue convulso. En las dos primeras temporadas trató de implementar su idea de juego y poco consiguió, pero con los fichajes de Ronald Koeman, Michael Laudrup y Hristo Stoitchkov levantaron su primera Copa de Europa en la temporada 1991-92 en Wembley gracias al recordado gol de Koeman ante la Sampdoria. Además, más adelante se fichó a Romário, y se formó un equipazo con una idea de juego implacable conocido como el Dream Team, que logró ganar también cuatro ligas consecutivas entre 1991 y1994.

Por eso es que los jugadores vascos tuvieron un gran papel. Quizá el protagonismo se lo llevaran las cuatro estrellas extranjeras, pero no se debe olvidar que Alexanko, Zubizarreta, Begiristain, Bakero y Goikoetxea son historia viva del club. Contribuyeron en ese equipo emblemático y de hecho Cruyff se enamoró de los jugadores vascos ya que consideraba que en ese momento eran más valientes que los catalanes. En el caso de Salinas, Recarte y Unzué, tuvieron un paso más efímero por el equipo, pero pudieron disfrutar del sublime juego del equipo. Podríamos contar también a un noveno vasco, Xabier Eskurza, pero tan solo estuvo una temporada y fue ya en la era final del Dream Team.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *