Un partido sin preámbulos, enfrentaba a España y Alemania, con un único objetivo por conseguir, llegar a la tan ansiada final del Mundial
Era la primera vez que el combinado español superaba la fase de cuartos de final de un campeonato mundial. Por su lado, Alemania buscaba su cuarta estrella de los mundiales, siendo una de las favoritas del torneo.
Cabe destacar la anécdota del pulpo que predecía los resultados del conjunto germano. Sin embargo, antes del decisivo encuentro de semifinales, el famoso pulpo Paul se decantaba por victoria de La Roja.
En el partido, la selección alemana partía de inicio con Neuer en portería. Una defensa de cuatro, formada por Philipp Lahm, Per Mertesacker, Arne Friedrich y Jerome Boateng. En la sala de máquinas, dispusieron de Schweinsteiger, Sami Khedira y Ozil de mediapunta. Cayendo en bandas estaban Trochowski y Podolski. Y, como referencia ofensiva Miroslav Klose.
Por su lado, el combinado español partía con Iker Casillas bajo palos, pareja de centrales Piqué, Puyol y, como laterales, Sergio Ramos y Joan Capdevila. Dos mediocentros de perfil más ofensivo como son Sergio Busquets y Xabi Alonso, por delante, creando juego, Xavi Hernández. Mientras que Iniesta caía en banda derecha, Pedro en banda izquierda y, David Villa como punta de lanza.
Primera parte
Después de los himnos nacionales se ponía el balón en juego por parte de la selección germana. El equipo de rojo se mostraba muy propositivo y dominador del esférico. Los dos equipos mostraban con mucho respeto y muy soólidos defensivamente, siendo una de las ocasiones más claras un pase filtrado hace Villa que este remató tímidamente. Las envestidas españolas seguían sucediéndose, pero una férrea defensa alemana repelía constantemente las acometidas.
Un centro lateral de Andrés Iniesta hacía levantar al banquillo español, tras el posterior remate de Carles Puyol dentro del área, sin embargo, el cabezazo se iba por encima de la meta de Neuer. A pesar del claro dominio español, estos seguían sin materializar sus ocasiones y presentaban serias imprecisiones con el pase. En el minuto 30, la presión alta de España seguía produciendo errores en la salida de balón de los teutones. La primera gran ocasión de los germanos fue un potente disparo de Trochowski, pegado al palo, pero Casillas despejaba a saque de esquina con contundencia.
La gran arma ofensiva de la selección bávara era su rapidez y sus contraataques con grandes cantidades de jugadores. Asimismo, en uno de los parones de juego del equipo de Europa Occidental, Alemania empezaba a tener más presencia en el juego y comenzaba a poseer el esférico. Asimismo, el principal problema que mostraban los once hombres de Vicente del Bosque, eran los últimos pases de cara a gol.
La primera mitad no iba a estar libre de polémica, pues una contra prácticamente perfecta de los germanos, acababa con Ozil derribado dentro del área de Iker Casillas. El posible penalti acabó en un contraataque español que hacia finalizar la primera parte con un potente disparo de Pedro a las manos de Neuer.
Una selección alemana de menos a más, jugando al contraataque, aprovechando al máximo todas sus armas. Sin embargo, como bien decía Michael Robinson, España jugando como una selección grande, lo que nunca habíamos visto ni pensado. Dos defensas muy firmes y mucho respeto en el campo.
Segunda parte
La segunda parte comenzaba con la tónica de la primera, una España dominante y la selección alemana haciendo daño a la defensa española al contraataque. Sin embargo, el combinado rojo demostró que a la contra también sabía salir en velocidad con un balón en largo para Pedro que, tras varios regates, retrasó el balón para que Xabi Alonso golpeara a desde fuera del área, poniendo el miedo en el cuerpo a los alemanes. Los de Vicente del Bosque comenzaban a avisar a los teutones con largas jugadas trenzadas y disparos lejanos de Xabi Alonso.
En el minuto 51 se retiraba Boateng por lesión y entraba Jansen, con la intención de paliar las constantes embestidas de Sergio Ramos y Pedro Rodríguez por la banda derecha del ataque peninsular. Las constantes acometidas de España seguían inquietando a los bávaros. Esta vez también con jugadas trenzadas y un Pedro muy eléctrico por banda que cedía para un remate de Villa desde la frontal.
Los españoles seguían insistiendo, siendo dueños y señores del encuentro. Pedro siendo rompedor, con un tiro que obliga a Neuer a pararla y luego la posterior ocasión de Iniesta que casi envía Villa al fondo de las mallas.
El segundo cambio de Alemania se ejecutaba en el minuto 61, cambiando a Trochowski por Toni Kroos, con un cambio que buscaba tener más el dominio del esférico. Cuando parecía que España dominaba completamente el partido, una contra germana produce que Podolski pueda centrar el balón para que Toni Kroos remate solo contra Casillas. Pero Iker despejaba el balón con contundencia.
Los bávaros no querían quedarse atrás por lo que mostraban todas sus armas, sobre todo, al contragolpe y balón parado. Sin embargo, en el minuto 73, la felicidad inundaba las calles españolas. Un saque de esquina de Xavi, producía un remate salvaje de Carles Puyol que colocaba el 0-1 en el marcador.
Los últimos quince minutos fueron un vaivén de emociones. Los alemanes ante sus últimas balas y una España con tranquilidad e intentando hacer bien las cosas. Low sustituía a Khedira por Mario Gómez, metiendo pólvora ofensiva para intentar igualar la contienda. Por el cuadro de La Roja salía Torres y Villa entraba al banquillo, con la intención de matar la eliminatoria.
Las ofensivas españolas no acababan de ser eficaces debido al cansancio acumulado de los jugadores. Asimismo los papeles habían cambiado, eran los alemanes quienes dominaban el cuero y los españoles aguantando las acometidas. En una gran ovación, se iba Pedro del campo, dejando su puesto a otro canario, David Silva. Y, la última sustitución del encuentro fue Carlos Marchena, que sustituía a Xabi Alonso, para fortificar la defensa en los últimos sesenta segundos.
La selección española anuló hasta, la que el momento, era el mejor equipo del torneo. El centro del campo español ha hecho que la calidad de los centrocampistas de Löw fuese una nimiedad. Un partido trepidante, sensacional y emotivo. La primera final de una Copa del Mundo para el país ibérico.