Una de las grandes estrellas del fútbol alemán se ha reencontrado con su mejor versión en esta temporada bajo el mando de Hans-Dieter Flick
Todos conocemos a Thomas Müller, uno de los viejos conocidos de la Bundesliga. Característico por su delgado cuerpo y la fuerza que transmite al celebrar sus goles en estático con el puño elevado. A sus 30 años ha vuelto a ser uno de los pilares más importantes para el Bayern Münich en una de las ligas más disputadas en los últimos años, incluso batiendo un récord.
Alternando entre ser mediapunta y falso extremo derecho, Thomas ha alcanzado por primera vez en su carrera las 20 asistencias en una temporada de Bundesliga. Lo logró en el último partido disputado, la victoria contra el Bayern Leverkusen (2-4), donde asistió en dos de los cuatro goles de su equipo. Así, Müller logró batir el récord que compartían Kevin de Bruyne y Emile Forsberg, ambos con 19 asistencias en una temporada de liga alemana.
Tras haber tenido un rendimiento discreto en la temporada 2018/19 (9 goles, 16 asistencias) y en la 2016/17 (9 goles, 17 asistencias), en comparación a lo que ha aportado a lo largo de su carrera en Münich, parece que Thomas Müller ha vuelto a las andadas de la mano de Hans Flick, con quien el equipo en general ha vivido una mejoría importante, especialmente en la forma de jugar.
Todavía con aspiraciones a ganar el triplete -sería el segundo en su historia-, el Bayern puede estar feliz de que una de sus veteranas estrellas haya vuelto a ser crucial de cara a puerta. Será interesante ver cómo Müller y el equipo bávaro se desenvuelven en lo que resta de campaña.