Rode es considerada como la eterna promesa del fútbol alemán que, sin acabar de explotar de forma definitiva, sigue devaluando su carrera
El mediocentro alemán comenzó su carrera Kickers Offenbach de la tercera división el país germano. En dicho equipo estuvo entre el 2008 y el 2010, disputando, únicamente quince partidos y anotando un solo gol. De hecho, cuando iba a comenzar a tener una mayor importancia y relevancia en el juego del equipo, el Eintracht de Frankfurt apostó por Rode para su cantera.
Rode, en el Eintracht, defendiendo la camiseta de Frankfurt estuvo durante cuatro temporadas, desde el 2010 hasta el año 2014, un ciclo de los mundiales. Jugó 108 encuentros con dicha elástica, y anotando cinco goles. Sin embargo, su juego posicional comenzó a destacar y ya apuntaba como una de los jugadores más prometedores del fútbol alemán.
No obstante, ante el comienzo de su progresión y la llegada de Pep Guardiola al banquillo del Bayern de Múnich, Sebastian Rode se convirtió en uno de los primeros fichajes de la era del entrenador español. En la temporada 2014-2015, en el mercado de invierno, fichó por el combinado bávaro, con el que completó dos temporadas. De las 52 participaciones que tuvo con el equipo en dicha etapa, consiguió marcar cuatro goles. Pero, aunque Rode fuese petición expresa de Guardiola, el jugador ha admitido en alguna ocasión que el técnico apenas le dirigía la palabra.
Sin embargo, esta ha sido considerada como la etapa más fructífera para el mediocentro germano. Sus sensaciones en el campo cada vez eran mejores y su nivel de juego no hacía sino aumentar. Por ello, se le empezaba a considerar como una joven estrella. Pero, en el año 2016 todo se empezó a torcer para Rode. Tuvo que abandonar el Bayern de Munich por la puerta de atrás y sin ningún tipo de agradecimiento.
Fue el Borussia Dortmund, máximo rival del Bayern de Munich, quien se hizo con los servicios del mediocentro. En los tres años que estuvo en las filas del combinado amarillo de Alemania, tan solo pudo jugar 22 encuentros. Las lesiones comenzaron a lastrarle y quitarle continuidad. Y, cuando no estaba lesionado, carecía de la confianza del entrenador. Siguiendo, con ello, con su imparable cuesta abajo y sin frenos.
En el invierno de 2018 salió del Dortmund en calidad de cedido hacia el Eintracht de Frankfurt, donde ya disputó los mismos partidos que en su club de origen. El pasado verano se hizo oficial su traspaso, de forma definitiva al Eintracht. Parece que comienza a ser el jugador técnico, con seguridad y siendo una barredora en el centro del campo.
Pero, lamentablemente, la carrera de Rode parece que ya no se va a poder encauzar y acabará siendo la eterna promesa de Alemania, durante toda su carrera. Mucho talento desperdiciado y un prometedora carrera truncada por las constantes lesiones que no le permitían tener estabilidad ni continuidad en el juego. Simplemente, un despropósito total.
