Recientemente renovado, Oliver Norwood es una de las claves del buen funcionamiento del Sheffield United
Hablar del Sheffield United es hablar de un club que ha irrumpido en Premier, y que cada día crece en popularidad. Es cierto que tras la cuarentena, el Sheffield no es que esté encontrando los resultados positivos que venía trayendo. Pero si algo no ha cambiado, es el juego propositivo y novedoso que el conjunto de Chris Wilder lleva proponiendo toda la temporada. Y una de las grandes claves de este juego es Oliver Norwood.
Oliver Norwood es un jugador de 29 años nacido en Irlanda del Norte. Pudiendo desempeñarse en todo el centro del campo, lleva varias temporadas alternando el mediocentro con el pivote, además de ir cambiando de equipo. En 2016 llega al Brighton, equipo donde es un fijo en la temporada del ascenso a Premier. Pero no le dan la oportunidad, y sale cedido al Fulham. De nuevo, es pieza clave en el equipo que enamoró en Championship y ascendió. Y, de nuevo, no le dan la oportunidad.
Así, termina yéndose cedido al Sheffield United en 2018, y aquí encuentra su ecosistema perfecto. Logra el ascenso a Premier y, finalmente, el Sheffield le compra por unos 2 millones de € y le da la oportunidad de jugar en la máxima categoría del fútbol inglés. Y esta temporada, junto a todo su equipo, ha sido una de las grandes sorpresas en Premier, tanto por nivel como por su función.
En el Sheffield de Wilder no podemos hablar de posiciones, sino de funcionalidades, pues es un equipo en el cuál los centrales doblan a los laterales para lograr superioridad, o en el que necesariamente no se le pide a un delantero que marque goles, sino que sea un gran distribuidor de juego. En esto, la función de Norwood es una de las claves para que todo esto funcione a máximo nivel. Para que Jack O’Connell o Chris Basham puedan doblar a sus laterales, Norwood ejerce una función primordial. Cuando estos arrancan por banda, es el norirlandés el que se queda atrás, formando una línea de dos “centrales” normalmente con Egan. Esto da estabilidad defensiva al equipo, y ofrece además una línea de salida de balón muy efectiva.
Además, con este movimiento, y junto a John Fleck, que hace las de mediocentro posicional aunque de vez en cuando se une al ataque, ambos cubren el espacio que John Lundstram deja, pues el inglés es un centrocampista con alma de delantero y no duda en sumarse al ataque. Por ello, en el 1-3-5-2 característico de Chris Wilder, Norwood es el pivote posicional, mientras que Fleck y Lundstram intercambian alturas como mediocentros, siempre bien respaldados por el jugador de Irlanda del Norte. Pero esto no quita que, cuando tiene la oportunidad, Norwood se sume al ataque, sorprendiendo desde segunda línea y utilizando el aclarado que normalmente suele dejar Lundstram.
En definitiva, la función de Ollie Norwood en el Sheffield United de Chris Wilder es fundamental, pues sin él sería muy difícil que el equipo realizara los movimientos que realiza. Ya se está intentando que Sander Berge haga las funciones de Norwood, pero de momento se observa al noruego más cómodo como mediocentro o en un doble pivote acompañando al norirlandés. Así, que seguiremos viendo a Norwood como “cuarto central” durante algún tiempo más.