Mañana el técnico cántabro volverá a disputar un partido en el Benito Villamarín como entrenador, pero en este caso no defenderá los colores verdiblancos sino los blaugranas.
Quique Setién llegó al Real Betis la campaña 17/18, durante su estancia en la ciudad sevillana disputó un total de 77 encuentros en la Liga Santander, promediando 1,46 puntos por partido. Además, llevó al conjunto sevillano a competiciones europeas, gracias a un excelente juego combinativo demostrado en su primera temporada. Se ganó el cariño de la afición, pero a la temporada siguiente, una tempranera eliminación en la Europa League frente al Rennes provocó que el equipo se deshinchará, y que dejase de disputar puestos de competiciones europeas a estar en media tabla. Al no cumplir con las expectativas, Quique Setién tuvo que abandonar el Betis al final de la temporada pasada.
Pero tal como se fue en su momento vuelve ahora, sin un equipo que transmita sus ideas en el césped, con una parte de la afición cuestionándole y con unos resultados mejorables. Todo eso provoca que Quique Setién haya vivido en una montaña rusa estas dos últimas semanas. Tanto Real Betis como FC Barcelona necesitan una victoria para poder remontar el vuelo y así cumplir con las aspiraciones puestas a principios de temporada, así que el técnico cántabro disputará uno de los partidos más complicados hasta el momento en el campo donde sufrió episodios gloriosos y catastróficos. Mañana los dos equipos tendrán más que un partido en juego, en el que el Betis quiere demostrar que puede volver a Europa y el Barça seguir en la pelea de La Liga.