El fútbol tiene una serie de personajes que lo han cambiado radicalmente, puede parecer algo sencillo, pero John Brodie cambió este deporte
Todos tenemos una idea de lo que es el fútbol, la pelota como elemento indispensable, un par de porterías y gente contra la que jugar. Son cosas necesarias, ya que sin ellas este juego no tendría ningún sentido.
Las porterías no siempre han sido como las conocemos. Estamos tan acostumbrados a ver porterías con redes, que ya se nos olvida que no siempre fueron así.
Cuando este bello deporte a penas comenzó, nunca se pensó en ponerle unas redes a las porterías. Hago un pequeño parón para decir que, probablemente, las porterías han sido el elemento que más cambios ha sufrido. Más grandes o más pequeñas, palos cuadrados o circulares…
Pues uno de esos primeros cambios llegó de la mano de John Alexander Brodie. Nació en Inglaterra en 1858 y fue un importante ingeniero. Con el paso del tiempo se fue haciendo un hueco en su sector, llegando a ser una gran celebridad. Entre sus obras más importantes destacan el Queensway Tunnel y el diseño de la ciudad de Nueva Delhi (India).
Es probable que te preguntes por qué una persona tan inmersa en la ingeniería gastaría una pizca de tiempo en el fútbol. Pues hay una respuesta, bastante sencilla además, él era un gran aficionado del Everton.
Precisamente, la idea de colocar una red a la portería, surgió en un partido entre el Everton y el Accrington Stanley. En aquel duelo, su equipo del alma no logró la victoria. Lo curioso es que el partido lo perdieron por un gol legítimo que no se concedió, ya que no sabían por donde entró la pelota.
Esos engaños ópticos eran algo que nunca se habían planteado, pero John Brodie, resignado por tal injusticia, empezó a diseñar algo que pudiera solucionar ese tipo de situaciones.
Y sin más dilación creó una red de nailon que se colocaría detrás de las porterías, para saber por donde había entrado el balón. También hay que añadir que la red servía como distancia entre los aficionados, pues muchos de ellos se colocaban cerca de las porterías e interrumpían las jugadas.
No obstante, no sería hasta 1891 cuando la Football Association (máximo organismo del fútbol inglés) aceptaría la idea de John Brodie para que fuera probada durante un partido. El jugador del Everton, Geary, sería el primero en meter un gol en una portería con red.
Sin embargo, los medios de información, de por aquel entonces, fueron demasiado escépticos y tacharon al invento de poco efectivo. También se puede decir que eran muy conservadores, pues no les convencía la idea de modificar las porterías.
Un año después, en la final disputada entre Aston Villa y West Bromwich, fue cuando realmente se le dio la importancia que se merecía. En ese duelo se utilizaron las redes de nailon, y tras terminar el partido los medios cambiaron su punto de vista.
La prensa dijo que las redes fueron realmente útiles, ya que dos de los goles fueron por debajo del palo. De esta forma el árbitro podía saber a ciencia cierta si era gol o no y no tomar una decisión precipitada.
A partir de ese momento el fútbol cambiaría para siempre. Desde 1894, todos los clubes ingleses tenían porterías con redes, y así ha sido hasta la actualidad. Un elemento bastante sencillo que otorgó mucha más justicia al fútbol.
A veces las ideas más simples son las más efectivas. John Brodie demostró que con un simple elemento se podía hacer del fútbol un deporte más justo. Puede parecer un mero cambio, pero John Brodie hizo que el fútbol que nosotros conocemos sea tal como es.