La nueva norma lanzada por la FIFA ha dado pie a muchos debates, sobre a qué equipos les perjudica más y ha dejado entrever discrepancias entre distintas figuras del fútbol español
“Los cinco cambios creo que nos van a perjudicar, porque muchos partidos los resolvíamos en los minutos finales y los rivales tendrán más gente fresca”. Estas palabras salieron de la boca de Quique Setién, entrenador del FC Barcelona, haciendo alusión a la nueva medida implementada para la reanudación del “nuevo fútbol” . Tras haberse mostrado reacio a esta nueva medida, sobre él se ha levantado una avalancha de mensajes en los que se le tildaba de “llorón”. En la entrevista, el técnico azulgrana emplea el término “creo” para lanzar su hipótesis, sin mostrar en ningún momento una absoluta certeza de que esto ocurrirá.
El gallego hace referencia al rédito que obtiene el Barcelona en los minutos finales de los partidos. Después de haber sometido al contrincante a estar corriendo por detrás de la pelota durante más de una hora. Alega que cuando más cansado está el equipo rival, el Barça explota de forma exponencial la calidad de sus jugadores.
Esta teoría, tiene un detractor en José Bordalás, técnico del Getafe. Sostiene que la implantación de un quinto cambio afecta positivamente a los equipos más grandes. Todo el peso de su argumento lo sitúa en aquellos jugadores que conforman el banquillo de un Real Madrid, un Fútbol Club Barcelona, un Atlético de Madrid etc. En estos tres equipos, particularmente, el banquillo está conformado por jugadores que serían teóricos titulares en los 17 equipos restantes de La Liga.
La deliberación de esta norma ha sido tomada a raíz de los pocos entrenamientos que han podido realizar los jugadores antes de la reanudación de la competición doméstica. Se prevé que su vigencia expire antes del 31 de diciembre de 2020, aunque se estudiará su ampliación de cara a 2021.
Hecha la ley, hecha la trampa
Ahora queda por ver qué uso se le dará a esta nueva medida. Ya que uno de los debates que más fervor genera en el mundo del fútbol, es el tiempo que se pierde entre sustitución y sustitución. Si bien con 3, los entrenadores se guardaban un último cambio en la recámara para arañar segundos al reloj, con 5 puede ser el acabose. Ante esta “adulteración” del tiempo de juego estipulado, La Liga lleva tiempo tomando cartas en el asunto. Sin embargo, desde este año, se ha ordenado a los jugadores a salir por la zona más cercana en la que se encuentren en el momento en el que el cuarto árbitro levante la tablilla con su dorsal.