Con la reciente renovación de Nais Djouahra hasta el 2023, la entidad txuriurdin refuerza aún más su proyecto a largo plazo
¿Qué sería de la Real Sociedad sin sus canteranos? ¿Qué sería de este enorme club sin esas promesas que llegan al primer equipo cada verano? Hoy en día se nos hace inimaginable una Real que no focaliza su proyecto en Zubieta, en el trabajo desempeñado día tras día en sus instalaciones. Y es que durante los últimos años, con Jokin Aperribay al mando de la planificación deportiva, y un Roberto Olabe que no se queda atrás, el proyecto del conjunto txuriurdin ha ido cogiendo forma.
Hasta tal punto que hoy en día se encuentra en una excelente situación y que tiene como base a una de las mejores canteras de España. Gracias, eso sí, al encomiable esfuerzo de todos y cada uno de los que forman este ambicioso e ilusionante plan de futuro. Con la ampliación de contrato de Nais Djouahra recién pactada, el cuadro vasco redondea un verano atípico a la vez que clave de cara al próximo curso. Sin lanzarse al mercado estival de forma desesperada, los donostiarras han cerrado numerosas renovaciones a lo largo de estos meses.
Cabe destacar que la mayoría de estas son de jugadores formados y curtidos en casa. Razón por la que la directiva sigue apostando firmemente en su idea y no le tiembla el pulso a la hora de tomar decisiones. Andoni Gorosabel y Robin Le Normand fueron los primeros, seguidos por Zubimendi y Merquelanz. Aritz Elustondo, uno de los más veteranos, también pasó por las oficinas del Reale Arena hace unos días. Ahora, en plena ventana de fichajes, ha sido el extremo franco-argelino el que ha ampliado su vinculación con el club.
Con la continuidad del líder, el capitán Mikel Oyarzabal, bien asegurada por el momento, el club ha creado un bloque de jugadores totalmente válido para dar guerra en cualquier competición. Si a esto le sumamos el grupo de scouting, el cual ha reclutado varias perlas como Robert Navarro últimamente. O incluso unos fichajes de renombre como el de David Silva, el resultado es sobresaliente. Obviamente, la nota final habrá que valorarla sobre el terreno de juego, ya que superar las expectativas del año pasado no será tarea sencilla.
Aún así, Imanol Alguacil cuenta con la cuarta plantilla mejor valorada de La Liga Santander, con un total de 16 potrillos en ella. Números de escándalo, que demuestran una vez más la seriedad con la que se está afrontando este nuevo paso.