Es un momento crucial de la temporada para el Atlético y para Felipe, en busca de La Liga y el pase en Champions
Con la lesión de Giménez, el brasileño debe dar un paso adelante en su forma física y tal y como demostró en el partido ante el Valladolid, mantener imbatida la portería de Oblak.
El pasado 1 de diciembre, el Atlético de Madrid jugó contra el Bayern de Múnich, cuyo encuentro finalizó con empate a 1. En el minuto 67 se produjo la lesión de Giménez, que le tendrá en el dique seco varias semanas. En ese momento, Simeone dio entrada al brasileño Felipe, quien a diferencia de la temporada pasada lleva sin ser titular durante bastantes partidos.
Su rendimiento respecto a la pasada temporada
En la temporada pasada, Felipe era un fijo en las alineaciones del Cholo, pero por desgracia se lesionó y no volvió a ser el mismo, su recuperación no ha sido todo lo óptima deseable, los 20 millones de coste de su fichaje que parecía una gran inversión se esta volviendo contrario debido a su rendimiento esta temporada.
Ahora mismo es cuando le toca a Felipe demostrar que aún conserva ese nivel demostrado la pasada temporada, formando dupla con Savic.
Dicho esto, todas las miradas del cuerpo técnico y de los aficionados atléticos están puestas en él, para que vuelva a ser el jugador decisivo que ha sido. Su presencia en el eje del defensa acompañado del buen nivel que están mostrando el resto de los defensores, ello harían impenetrable la portería si cabe aun más del equipo menos goleado de La Liga Santander.
Felipe Augusto marcó una regularidad en los 25 encuentros que jugó en la temporada 19-20 donde su ubicación y rapidez en los cortes de balón y en el despeje del juego aéreo, le hicieron destacar como sus armas más poderosas.
Felipe está y se le espera
Desde sus inicios en La Liga portuguesa hasta la actualidad, la regularidad en su juego siempre ha estado en un nivel constante en este jugador, extrañamente solo ha sido seleccionado una vez por el equipo nacional brasileño. Pese a no ser un jugador joven, a sus 31 años le llega el momento de ser el central de referencia de un equipo llamado a ganar cuantas competiciones juega.
Ahora sí, junto con Savic le toca un mes de diciembre marcado por las tres competiciones, y donde deben certificar su candidatura.
En Liga viajarán la próxima semana a jugar en Valdebebas frente al Madrid y el día 22, a Anoeta, frente al actual segundo clasificado de la Liga, la Real Sociedad. En Copa, el 17, deben viajar a Mallorca para enfrentarse al Cardassar. Y en Champions el martes, a Salzburgo para certificar el pase a octavos.
Un durísimo camino para los rojiblancos, que sin algunas de sus mejores armas, deben dar un paso adelante.
