Corría la temporada 99/00 cuando el Real Zaragoza clasificó cuarto en la Liga española lo que en un principio le permitía clasificar a la Champions pero un imprevisto le privó de esto
Momento de transición entre el fin de un siglo y el principio de otro y no había mejor forma que tener una campaña atípica. El RC Deportivo de La Coruña se alzaba con su primera Liga. El alavés alcanzaba una valiosa sexta plaza. Pero el mejunje de la cuestión recaía en el cuarto clasificado. El Real Zaragoza quedaba cuarto lo que le permitía ir la temporada siguiente a la Champions, o así iba a ser en un principio.
Análisis de la temporada
El club maño se mantuvo regular a lo largo de toda la temporada cosechando un total de 16 victorias, 15 empates y 7 derrotas en los 38 partidos. Con seguro de goles arriba como era Milosevic con 21 goles y un candado en portería con Juanmi Inglés, los maños se auparon hasta la cuarta plaza.
En las diez primeras jornadas consiguieron sumar de tres hasta en cinco ocasiones además de empatar contra Atlético, Sevilla y Espanyol. Unos resultados bastante buenos que le permitían estar en la zona alta de la clasificación.
En los siguientes partidos se produjo la histórica goleada al Real Madrid en el Santiago Bernabéu por 1-5. Con este resultado el Real Zaragoza tenía más que asegurado el gol average con los blancos, salvo sorpresa en el encuentro de vuelta.
La posición de los maños a la mitad de la temporada era correcta, afincados en la zona de Europa querían seguir soñando con la Champions. El club aragonés no encadenaba más de dos partidos sin sumar un punto y más de tres sin ganar lo que le permitía ir sumando de poco en poco.
Hay dos momentos claves en el final de la temporada. Primero fue el partido contra el Real Madrid, encuentro clave para poder seguir por encima de los blancos y con la ventaja de goles. La Romareda se llenó pero a pesar de esto fueron los visitantes los que ganaron por 0-1, sin llegar a gana el gol average.
El siguiente punto caliente de la temporada llegó en la última jornada. Tercero, Real Zaragoza, y quinto, Valencia, se enfrentaban en Mestalla en lo que iba a declinar quien iba a conseguir plaza segura en Champions. Los dos equipos con un ojo en el partido en Madrid por si los blancos caían contra el Valladolid.
Al termino de los noventa minutos, los maños cayeron derrotados por 2-1 lo que permitía al Valencia alcanzar la tercera posición, pero la derrota del Real Madrid dejaba al Real Zaragoza cuarto. Los maños estaban contentos por haber logrado el pase a la máxima competición continental pero no sabían todo.
La debacle
Tan solo cuatro días después del final de la Liga, se disputaba la final de la Champions League. Real Madrid y Valencia se batían en un duelo a muerte por reinar en Europa. Si los blancos ganaban el partido el cupo de españoles que podía ir a la Copa de Europa estaba llena y por tanto el cuarto clasificado caía a la Copa de la UEFA.
Todos los zaragocistas se volcaron con el Valencia quien quería conseguir su primera Champions. El primer gol de Morientes, tan querido en Zaragoza, empezaba a quitar las ilusiones de los maños. Los tantos de McManaman y Raúl a falta de 15 minutos eliminaron cualquier tipo de ápice de esperanza.
Finalmente el Real Madrid ganó la octava y Valencia y Zaragoza acabaron desoladas. La capital del Turia por no poder coronar una competición impecable y la capital del Ebro por el hecho de no poder jugar la Champions la temporada que viene.