Tras la salida del equipo de Gianluigi Donnarumma al PSG, Simón Kjaer se encuentra “en la pole” para hacerse con la cinta de capitán del cuadro rossonero
Simón Kjaer es líder y referente del plantel joven del conjunto rossonero, y por sus grandes dotes de liderazgo, la directiva y el cuerpo técnico lo están considerando como capitán para la siguiente temporada.
El central danés es el guía silencioso de este prometedor grupo de jugadores, demostrándolo tanto dentro como fuera de la cancha.
Desde su llegada al equipo, Kjaer se afianzó rápidamente con el rol de titular, formando una gran pareja de centrales con el capitán en ese tiempo, Alessio Romagnoli.
Con el pasar de la temporada, Romagnoli comenzó a ser un punto bajo, y fue ahí cuando Kjaer se convirtió en figura.
La figura del defensor danés llegó a tal punto que cuando el equipo pasó por una situación difícil en los resultados, el siguió siendo un punto alto.
En consecuencia de esto, la regularidad y el liderazgo de Kjaer fue el principal factor en la mesa para considerarlo como capitán para la siguiente temporada.
La salida de Donnarumma llevó a la directiva a plantearse nuevos candidatos a la cinta, dónde apuntaban a: Frank Kessie, Davide Calabria y Zlatan Ibrahimovic.
Sin embargo, todo apuntaba que el capitán la siguiente temporada sería el marfileño, pero después del gesto del danés con su selección, parece que hizo cambiar de opinión a la directiva.
El ángel de la guarda de Christian Eriksen
En el minuto 10′ del partido inaugural de Dinamarca en la Eurocopa, Christian Eriksen se desplomó en el suelo mostrando complicaciones de salud. En este suceso, Simón Kjaer se vistió de héroe con sus acciones mostradas.
El central danés reaccionó de una manera perfecta, evitando que se ahogara con su propia lengua, y colocándolo en posición para que el personal médico trabajara.
Más allá de eso, ordenó a la selección alrededor de Eriksen para que los medios no tomaran fotos y consoló a la mujer del jugador.
Tras este gesto, Kjaer se ganó la admiración del mundo y Milan lo considera el candidato más idóneo para llevar la cinta. Gesto de hombre verdadero.