Unai Simón es el portero elegido por Luis Enrique para disputar esta Eurocopa, con el altavoz mediático que eso supone
El portero del Athletic Club está siendo el guardameta titular de la Selección Española en esta Eurocopa. Con aciertos y errores, como todo hijo de vecino, Simón demuestra una asombrosa seguridad en sí mismo. Cabe recordar que hablamos de un jugador que acaba de acceder a un puesto de tanta responsabilidad y además en una cita tan importante.
Sus actuaciones hasta octavos
Si el nivel futbolístico de este torneo continental no está dejando indiferente a nadie, lo cierto es que el nivel de Unai Simón va en consonancia con esta afirmación. El portero gasteiztarra ha alternado algún error de bulto (véase el primer gol de Croacia en octavos) con paradas de mucho mérito que han valido puntos durante la fase de grupos e incluso el pase a cuartos. Con 3-3 y en la prórroga, Unai le saca una mano abajo a Pasalic que, tal y como había ido el partido, podía significar la puntilla a la moral del combinado español. Él lo evitó.
Algunos sectores de prensa y afición que sigue a la Selección Española se apresuraron en señalar que Simón no estaba preparado para afrontar tal reto. Lo cierto es que la sombra de Iker Casillas es alargada, pero no cualquiera se repone a tan duro golpe como es un error tan clamoroso en el primer gol de Croacia. Y no cualquiera asume el error con tanta naturalidad en un mundo donde son habituales las excusas para tapar los fallos.
La confianza y el grupo
“Cada día soy mejor portero. Hay pequeñas cosas que puedes mejorar, pero soy mejor que ayer y peor que mañana. No soy el portero del primer gol que encajamos”. Con esa frase, Unai Simón se mostraba satisfecho en rueda de prensa por su proceso de evolución personal, profesional y en concreto con esta Eurocopa. Asume el error y admite estar trabajando para ser cada día mejor.
En relación a esto, también comentaba el apoyo de su compañero David De Gea. El madrileño también sabe lo que es sentir el peso de la portería española en sus propios hombros. Por ello, Unai Simón quiso destacar su apoyo tras lo sucedido en el encuentro de octavos. De Gea se quedó esperando al portero titular de la Selección para aconsejarle. “Me tranquilizó mucho lo que me dijo”, aseveraba el jugador vasco. Otra muestra más del compañerismo que reina en el vestuario de la Roja y que, a todas luces, es lo principal que buscaba Luis Enrique con su convocatoria. Un grupo sin fisuras en este estilo, que se mantuviera fuerte en las duras.
Y hablando del grupo, el guardameta quiso resaltar la unidad y fortaleza mental del mismo. “Conseguir darle la vuelta juntos fue una muestra e la personalidad que tiene este equipo”, aseguró.
Lo que viene
Cabe pensar que Unai Simón, tras cuatro titularidades, será también el portero titular de la Roja en el cruce de cuartos ante Suiza. Cada partido es un mundo pero, de buen seguro, no será un encuentro fácil. Basándonos sobre todo en las instancias en las que estamos y en el ejemplo de resiliencia que nos dio Suiza contra la campeona del mundo, Francia.
En este sentido, Simón debe estar tranquilo. La confianza de Luis Enrique es creciente y sólida, más aún sabiendo el gran peso especifico que el seleccionador le da al carácter combativo de sus jugadores. Unai podrá tener virtudes y defectos, pero si algo no se le puede juzgar es la combatividad. Le tocará seguir por esa línea de seguridad y efectividad que le caracteriza, tendrá trabajo como para seguir demostrando y haciendo suya la portería de España.
