El conjunto de Vicente Moreno perdió por la mínima en Marbella en su primer partido de pretemporada
El primer enfrentamiento amistoso del nuevo Espanyol de Primera División ha dejado mucho que desear. Una derrota amarga, como todas. Aunque es muy pronto para sacar conclusiones de cara al inicio liguero en el próximo mes de agosto.
Varias novedades en el once inicial, como es normal en pretemporada. Víctor Gómez, Oier y Pol Lozano partían como principales novedades desde el inicio.
El equipo blanquiazul esperó al rival, como nos llevaba acostumbrados la temporada pasada, con un bloque medio. Un 1-4-4-2 con Raúl de Tomás y Melendo como referencias. Embarba y Nico Melamed en las bandas. Pol Lozano y Fran Mérida comandando el centro del campo. Y, en defensa, (de izquierda a derecha) Dídac Vilà, Cabrera, Calero y Víctor Gómez. En el segundo tiempo, todo cambiaría.
Recuperar balón y salir a la contra es lo que buscaba el Espanyol en ataque. Con balón, el equipo se mostraba escaso de ideas, sin fluidez. Pol Lozano y Fran Mérida se vieron desbordados por la presión de Las Palmas. Además, Óscar Melendo estuvo desaparecido durante todo el enfrentamiento. No encontraba la manera de integrarse al juego. Melendo es ese jugador que te aporta otra cosa distinta. Capaz de hacer magia en la mediapunta, pero el equipo no lo encontraba.
En fase defensiva, el equipo se mostró endeble, sin contundencia. Muchos desajustes y poca vigilancia a las espaldas. Sufrió mucho en el centro del campo, como comentamos anteriormente. La línea defensiva se comportó estable durante los primeros 45 minutos aunque hubieron fallos. En cambio, en la segunda mitad, el nivel bajó. Lluís López estuvo erróneo y a Cabrera se le notó cansado.
Detalles del partido
Destacar la presencia del perfil derecho (en la primera mitad), compuesto por Víctor Gómez y Embarba. Gran parte del ataque perico se concentró en esa zona. Muy activos ambos jugadores tanto en defensa como en ataque. Víctor Gómez sorprendió para bien, completó un gran partido.
La necesidad de un ‘6’. Un jugador posicional, que de equilibrio al equipo perico, de este modo liberando de cargos defensivos a, por ejemplo Darder, Fran Mérida o, incluso, a Keidi Baré, que es el jugador que ocupa esa posición cuando está disponible. Hoy el Espanyol ha echado en falta a ese jugador.
Los desmarques de Wu Lei. El jugador chino entró en el segundo tiempo por Raúl de Tomás en la punta de ataque. Durante esos 45 minutos estuvo muy participativo. Tirando diagonales y desmarcándose a la espalda de la defensa. El problema, que le falta la definición. Tuvo un par de 1vs1 pero acabaron con parada del portero. Si pule esa faceta Wu Lei, podemos estar hablando de un activo valioso, como revulsivo, para el Espanyol. Aunque llevamos esperando a que pula la definición un par de temporadas.
La no reacción de los cambios. Como en todo partido, el entrenador dispone de cambios. Y son revulsivos. Hoy no lo hemos visto así. Ninguno ha mejorado la actuación del jugador por el cual había sido sustituido.
Lo mismo que el año pasado. El equipo se comportó tal cual actuó en la pasada campaña. Pocas novedades. Pocos avances. Muchas cosas que mejorara y corregir. Quedan, mínimo, otros 3 partidos de pretemporada antes de que arranque la liga en El Sadar.