El extremo tinerfeño podría convertirse en nuevo jugador del máximo rival de su todavía equipo por petición expresa de Maurizio Sarri, nuevo entrenador de la Lazio
Pedro Rodríguez podría ampliar su vitrina de récords una vez más en los próximos días. Después de 40 años sin precedentes, podría convertirse en el primer jugador que decide cruzar el Tíber para vestir la camiseta del club rival.
Descartado por Mourinho, anhelado por Sarri
Luego de saber que no contaba para el nuevo entrenador giallorosso, José Mourinho, la AS Roma se dispuso a buscar una salida al veterano jugador. Es ahí donde apareció la Lazio. Especialmente, Maurizio Sarri, nuevo entrenador del equipo biancocelesti, quien dirigió a Pedro en la temporada 2018/2019 en el Chelsea y del que se llevó un muy grato recuerdo. De la mano del entrenador italiano, vivió su segundo mejor año en Inglaterra en cuanto a números individuales se refiere, cosechando trece goles y cinco asistencias.
Es por ello por lo que, a pesar de sus 34 años, se habría fijado el objetivo de fortalecer su ataque con el todavía jugador de la Roma. Ante la probable marcha de Joaquín Correa del equipo, ve en él una opción de garantía competitiva con la que cubrir, junto a Immobile y el regresado Felipe Anderson, el ataque de la Lazio.
En un principio, a pesar de la rivalidad y del descontento con el que acogería la hinchada giallorossa el cambio de aires, parece que el acuerdo entre clubes no está ni mucho menos lejano. La Roma no interpondrá el menor inconveniente en cerrar el acuerdo lo antes posible, e incluso podría acabar dándose el cambio de aires a coste cero. La principal razón se debe a que La Loba pretende ahorrarse lo antes posible el elevado sueldo de un jugador que no contará con minutos, En cuanto al acuerdo entre jugador y Lazio, el canario se aseguraría un contrato por dos años, en los que percibiría 3,5 millones netos por cada uno, al igual que en la Roma.
Tras el testigo de Carlo Perrone
Como mencionábamos al inicio del artículo, no se conocía un precedente de acuerdo por un jugador entre dos de los equipos con más rivalidad del mundo desde el año 1981. El protagonista fue Carlo Perrone, quien decidió dejar el biancocelesti por el giallorosso. Sin embargo, un año más tarde, terminó volviendo a su anterior club.
