El atacante portugués, Gonçalo Guedes, cuanto más centrado juegue sobre el verde mejor, pues mayor será su impacto para el Valencia
Es una obviedad que, cuanto más concentrado y motivado esté un jugador, mejor disputará y mayor impacto tendrá. El caso de Guedes no es diferente. De hecho al luso siempre se le ha notado en el Valencia. Siempre que está enchufado es un jugador diferencial en el terreno de juego. Jugador de altibajos e intermitencias. Pero siempre que está centrado es el mejor, en términos de calidad, de la plantilla del conjunto che.
No obstante, estas líneas no deben hablar sobre ese tipo de “centrado” del jugador. Sino más enfocado hacia la posición que este tiene actualmente sobre el verde. Guedes se desempeña como delantero, actuando por el carril central. Por tanto cuanto más centrado juegue mejor. Su impacto ha demostrado ser mayor en esa posición. Jugador capital como delantero, crea peligro y juego para que sus compañeros se nutran de ello.
En su llegada a Valencia hace cuatro temporadas, Guedes era un jugador puro de banda. Sobre todo, partiendo desde la izquierda. Pero con el paso de los cursos y el aumento de masa muscular del portugués su nivel en banda disminuyó considerablemente. Y hasta que Javi Gracia no lo alineó como punta, el luso estaba destinado al ostracismo en el Valencia y ser un jugador que debería ser vendido. Sin embargo, esa es una de las pocas decisiones acertadas del navarro en el Valencia.
Un claro ejemplo de lo expuesto es el partido de ayer frente al Barcelona. Con la entrada de Marcos André, Guedes quedó relegado a la banda. Y a partir de ese momento, el Valencia dejó de crear en ataque. El peligro que atesoraba el portugués dejó de aparecer y, por ende, el club de la ciudad del Turia dejó que abordar el área culé. Guedes es el faro ofensivo del Valencia y lo de ayer es un claro ejemplo de ello.
Obviamente y, aunque sea una perogrullada, la concentración de Guedes es esencial. Pero si su posición está centrada mejor. Básicamente porque hará efecto rebote hacia la motivación, ya que el jugador se siente importante en esa demarcación. Por tanto, los cambios deben ir orientados en otra dirección que no sea desplazar a Guedes a la banda. Pues el Valencia pierde más que gana con el portugués ahí.