Leroy Sané está atravesando por su momento más dulce desde que llegó a Münich gracias al nuevo rol que está desempeñando con Julian Nagelsmann
Hace poco más de un año, el Bayern Münich desembolsó una gran cantidad de dinero (60 millones de euros) por el fichaje de Leroy Sané. La ilusión con la llegada del alemán a Münich estaban por las nubes pero no llegó a cumplir con las expectativas y varias voces ya empezaban a catalogar de fracaso esta operación.
Sin embargo, la llegada de Nagelsmann y el nuevo rol que está desarrollando sobre el césped está cambiando los pitos por aplausos. Ahora mismo, es una de las grandes certezas competitivas de este Bayern Münich.
Nagelsmann recupera al mejor Sané
Desde que Leroy Sané debutase con el Schalke 04, se caracterizó por ser un extremo pegado a línea de cal, vertical y ,sobre todo, con mucha facilidad para sacar el disparo. Una gran actuación en el Santiago Bernabéu llamó la atención del Manchester City, que desembolsó algo más de 50 millones de euros por su fichaje.
En el Etihad, de la mano de un gran entrenador como Pep Guardiola, Leroy Sané experimentó una gran evolución en su juego. En alguna que otra ocasión, el jugador alemán elogió el trabajo de Pep con él y lo que le ayudó a crecer en sus años en Inglaterra. “Estoy muy agradecido por todo lo que me enseñó. Pep Guardiola me ayudó a llegar a un nivel muy alto. Es una persona muy meticulosa, que quiere sacar lo máximo de cada jugador. Es muy insistente, en lo que a táctica se refiere, pero lo considero algo positivo” explicaba en una entrevista concedida al Diario Bild.
Sin embargo, el globo de Sané parecía que se iba desinflando poco a poco cada temporada. Gran parte de culpa de esta situación tuvo que ver con la grave lesión que sufrió en su última temporada en el Manchester City, donde se rompió el ligamento cruzado anterior de su rodilla y le mantuvo alejado del terreno de juego durante más de 200 días. Esta lesión y el cambio de club la siguiente temporada parecieron pasarle factura a Sané en su primer curso en Münich. Sin embargo, la llegada de Nagelsmann y el cambio de rol sobre el terreno de juego que le está pidiendo a su compatriota están haciendo que podamos volver a ver una de las mejores versiones de Leroy Sané, por no decir la mejor, a lo largo de su carrera.
Su nuevo rol en el Bayern Münich
Julian Nagelsmann, uno de los entrenadores con mayor presente, pero, sobre todo, futuro en el mundo del fútbol, ha recuperado la mejor versión de un futbolista cuya carrera parecía cuesta abajo y sin frenos. En el 4-2-3-1 asimétrico que está planteando Nagelsmann en el Bayern Münich, el entrenador alemán le está dando muchísimo vuelo a Alphonso Davies, que actúa prácticamente como un extremo. Nagelsmann necesitaba de un extremo izquierdo que supiese atraer por dentro en el momento idóneo cuando el canadiense explotase las rupturas por banda.
Todos nos imaginábamos que ese extremo podría ser Serge Gnabry o, incluso, Jamal Musiala, un futbolista que encajaría como anillo al dedo en este rol. Pero, lo que nadie vimos venir fue que sería Sané el hombre en el que Nagelsmann confiaría este rol en el terreno de juego, ya que siempre ha sido un extremo de línea de cal y que no frecuentaba los pasillos interiores. Sin embargo, se está adaptando a la perfección a este nuevo rol. Ha resurgido de sus cenizas y, ahora mismo, es uno de los jugadores más en forma, ya no solo del Bayern Münich, si no del mundo.
Y es que los números reflejan el gran momento que está viviendo el alemán en este inicio de temporada. Está disparando mucho más que la temporada pasada (de 1,8 a 3,1 por partido). Está entrando bastante más en juego (de 39 intervenciones a 44 por partido). Y conectando mucho más con sus compañeros (de 18 pases por partido con un 78% de precisión a 22 con un 83%). En definitiva, estamos viendo un jugador muchísimo más maduro y mucho más involucrado en el juego del equipo.
Julian Nagelsmann está consiguiendo recuperar a un gran futbolista que, en los últimos años, parecía que se nos había quedado por el camino. Si sigue a este ritmo, este puede ser su gran año, siendo pieza clave de un equipo con grandes aspiraciones como el Bayern Münich.