La llegada del entrenador almeriense ha mejorado las sensaciones en labores defensivas del equipo franjiverde
La fragilidad defensiva fue uno de los lastres que condenaron la segunda etapa de Fran Escribá al frente del Elche. El valenciano basaba su idea en la solidez defensiva y el equilibrio, pero su equipo no se asentó en ningún sistema. Además de ello, acusó los fallos individuales para acabar siendo uno de los más goleados de la competición. Para buscar una solución, Francisco se convirtió en nuevo técnico del conjunto ilicitano.
El entrenador almeriense ha conseguido aportarle al Elche la seguridad defensiva que no tenía antes de su llegada. Y por ahora va por buen camino. Su equipo se ha asentado sobre un 4-4-2 simétrico y equilibrado en el que la intensidad no se negocia.
Una prueba de la mejora son los dos últimos partidos ligueros. Ante el Granada el equipo consiguió mantener la portería a cero pese a jugar con uno menos toda la segunda mitad.
En el último encuentro en el RCDE Stadium defendió una ventaja de dos goles conseguida en los primeros 15 minutos de partidos que solo se recortó con un penalti en una jugada individual.
En los primeros partidos con Francisco, Marcone era titular, pero Gerard Gumbau es el futbolista que se ha asentado al lado de Mascarell en el doble pivote. El jugar con extremos en banda en lugar de carrileros ha permitido a Tete Morente hacerse con la titularidad. Además, está siendo decisivo con dos goles y tres asistencias en las últimas 5 jornadas de liga.
Además, otros jugadores como Guido Carrillo o Pere Milla, que venían siendo habituales suplentes, están en su mejor momento de la temporada.
La línea defensiva la ocupan los mismos futbolistas que lo hacían con Escribá pero se nota una mejoría en sus prestaciones. En los laterales son fijos Mojica y Helibelton Palacios. En el eje de la zaga los problemas físicos han impedido que Bigas ocupe con regularidad la posición de central zurdo pero cuando ha estado disponible ha sido quien ha acompañado a Enzo Roco.
Pero más allá de los rendimientos individuales la mejora es colectiva. El bloque defiende mejor y se han dejado de hacer las concesiones que condicionaron los resultados de partidos anteriores.
El propio Francisco reconoció, en la rueda de prensa previa al encuentro ante el Espanyol, que ve a su equipo cada vez más “sólido y comprometido”. El propio Guido Carrillo coincide con su entrenador y afirmó este jueves que los futbolistas se encuentran más “sólidos y cómodos” en las últimas semanas.