Los blancos despejan dudas de cara a puerta pero siguen con problemas a la hora de entrar concentrados en las primeras partes
Después de varias jornadas con problemas de cara a puerta, el Real Madrid parece estar de vuelta. El partido contra el Alavés ha permitido a los blancos recuperar confianza con una victoria holgada. No obstante, el equipo dejó dudas en la primera parte, lo cuál se ha convertido en algo habitual en las últimas semanas.
Ya ocurrió en los partidos frente a Villarreal, Granada y el propio partido contra el Alavés, el equipo entra desconcentrado a los partidos. Ya lo dijo Ancelotti en la rueda de prensa posterior al partido contra el Alavés: el equipo no estaba contento al descanso.
A pesar de la primera parte regular, el equipo afinó la puntería en el segundo tiempo. El tridente formado por Asensio, Benzema y Vinicius volvió a funcionar y los tres vieron puerta. El Madrid volvió a marcar más de un gol en un partido, después de cuatro encuentros con muchos problemas de cara a puerta.
El funcionamiento del juego de ataque del equipo ha vuelto cuando Benzema ha empezado a coger ritmo de competición tras su lesión. El francés marcó de penalti el tercer gol del equipo y dio las asistencias a Asensio y Vinicius.
Asensio fue capaz de lo peor y lo mejor en el partido. Una mala cesión suya pudo ocasionar el gol del Alavés con empate a cero. Esta acción generó pitos, pero el balear supo sobreponerse abriendo el marcador con un gol marca de la casa. Aunque es posible que su gesto ante la grada no quede impune para la afición merengue.
Después de seis partidos sin ver puerta Vinicius ha vuelto a marcar gracias a su conexión con su mejor socio: Benzema. El brasileño ha vuelto a ver puerta y afianza su conexión con Benzema y demuestra que su mejora en la definición no es algo pasajero. Con Vinicius, Asensio y sobre todo Benzema enchufados, el Real Madrid ve más posible la remontada ante el PSG.