Las palabras de José María Cruz, director general del club nervionense, dejan abiertas las puertas a volver a contar con Martial
Martial ha sido una decepción para el Sevilla. Su incorporación en enero iba dirigida hacia el objetivo de conseguir algo más que la clasificación a Champions, pero la realidad ha sido diferente. El francés no ha colmado las expectativas que se pusieron en él, que fueron muy altas. No era para menos, pues el ex del Mónaco posee calidad y talento de sobra. Lesiones, problemas familiares y mala dinámica sumado a un cambio brusco de aires para tan solo cinco meses explican el fracaso de su paso por Nervión. Sin embargo, las declaraciones de José María Cruz dejan entrever que el club podría estar estudiando darle una segunda oportunidad.
Ten Hag no le quiere
Martial saldrá nuevamente del Manchester United, preferiblemente de forma definitiva para los intereses británicos. El nuevo entrenador no cuenta con él y así se lo ha hecho saber. Anthony sabe que tiene que buscar equipo. Y ahí es donde entra el Sevilla.
De alguna manera, Martial está en ‘deuda’ con el club andaluz y, pese a todo, se ha sentido agusto. “Creo que ha disfrutado jugando con nosotros. “Me imagino que ha descubierto que el Sevilla sería un buen club para tener una nueva oportunidad”, declaraba el director general. Desde tierras inglesas afirman que el jugador no ve con malos ojos volver a la ciudad hispalense a relanzar su carrera.
Posición del Sevilla
Monchi y su staff están a la espera. Cuando apostaron por Martial lo hicieron consensuando muy bien la decisión concluyendo con que era el perfil que le faltaba a Lopetegui en el ataque. Y ese pensamiento no ha cambiado. Obviamente, su rendimiento no ayuda, pero poniendo todo en contexto y analizándolo desde el lado objetivo, la situación podría revertirse.
Las herramientas están: Martial quiere volver a ser top y el Sevilla quiere un jugador diferencial. Con una pretemporada completa y con el hielo ya roto, todo sería más sencillo, pues el nivel del atacante es indiscutible pese a lo mostrado. Además, el Sánchez-Pizjuán es experto tanto en las segundas oportunidades como en relanzar carreras estancadas. Véanse los casos de Navas, Reyes o Jovetic y Gameiro.
El dinero, único escollo
La economía sevillista no es boyante al sol de hoy. Quedó demostrado con la venta de Diego Carlos. Y Martial sería caro; el United no quiere regalarlo y su sueldo es desorbitado. Quizá, la venta de Koundé pueda tener la llave.