La escudería británica sigue sin dar con la tecla para mejorar el coche y sigue sin encontrar soluciones
Aston Martin no empezó del todo bien la temporada y, hasta el Gran Premio de Singapur, eso no ha cambiado. El AMR24 es un coche duro con las gomas, causando una degradación catastrófica de las mismas, no sobresale, ni en curva rápida, ni tampoco en curva lenta. Parece ser que el coche no destaca en ningún área y sí que tiene puntos negativos importantes.
Las “mejoras” han ido llegando durante el año, aunque hay que especificar que el término “mejoras” es una manera para referirse a las nuevas piezas, ya que no han mejorado el rendimiento. De hecho, y como ya les pasó el año pasado, algunas nuevas actualizaciones han causado problemas que han tenido que arreglar trayendo más piezas.
El AMR24 que se ha presentado en Singapur es una especie de fránkenstein. Este que combina piezas que habían sido descartadas o cambiadas por otras “mejores”. Un ejemplo es el suelo del coche, en Imola se introdujo un nuevo modelo, carreras después se cambió porque no funcionaba y volvió la pasada carrera en Bakú.
Un futuro esperanzador
Si bien las cosas no están yendo como deberían en 2024, el futuro no será así, o al menos a partir de 2026. 2025 se antoja como un año complicado, puesto que será el último año del reglamento actual y la mayoría de los esfuerzos estarán puestos en el diseño del coche de 2026. No obstante, Aston Martin cuenta con dos claves que desde marzo de 2025 trabajarán juntas: Fernando Alonso y Adrian Newey.
El AMR25 empezará la temporada, probablemente, siendo el 5º coche de la parrilla o incluso peor. Sin embargo, tanto Adrian Newey como el nuevo túnel de viento entrarán en funcionamiento. Eso se traduce en que las mejoras que traerá Aston Martin antes del parón veraniego ya serán utilizando el túnel de viento y los conocimientos del genio británico.
El año 2026 será una moneda al aire, pero Lawrence Stroll ha hecho lo posible para que todo salga bien. Newey, Cardile o Cowell son algunos de los nuevos fichajes que el magnate canadiense ha hecho con vistas a 2026. Además, también hay que sumarle que dejará de ser un equipo cliente para ser motorizado por Honda. Y por si no fuera poco, el patrocinador principal de Aston Martin es Aramco, quien lleva más avanzado el desarrollo del nuevo combustible sintético.