Anoche, el lateral británico concedió dos asistencias para vencer plácidamente al Valladolid y proseguir con el liderato
Diego Pablo Simeone finalmente ha conseguido dar con la tecla. Tras un año de transición, acomodó a todas sus piezas donde él quería y se están comenzando a recoger los frutos de su inverosímil labor. De la portería al ataque, los colchoneros están carburando y de qué manera.
El cambio de sistema propuesto por el técnico argentino, sobretodo logra potenciar los flancos. Los laterales están sabiendo potenciar sus labores ofensivas más que nunca, sin olvidar sus tareas defensivas. De aquí el gran muro atlético, que en diez jornadas ligueras, ha encajado dos tantos.
¿3-5-2? Como anillo al dedo
La adaptación de Kieran Trippier en el Atlético de Madrid era todo un enigma, debido a que los jugadores ingleses provenientes de la Premier League, están catalogados como ‘fracasos’ lejos de su país. Sin embargo, el británico ha destrozado el mito. Mismamente que Jadon Sancho, los ingleses están brillando en sus ligas y la leyenda urbana perdió toda su credibilidad.
Además del gran año de debut que Trippier quajó, se ha encariñado totalmente de la entidad, mostrándose siempre agradecido por la oportunidad y el cariño brindado. En multitud de ocasiones afirmó que si hubiese sabido antes lo feliz que sería en la capital, habría venido antes. El corazón de los indios lo tiene más que ganado y el carril diestro, también. Se ha apoderado totalmente de la herencia que dejó Juanfran y ha eclipsado por completo las oportunidades de Sime Vrsaljko, Ricard Sánchez y el traspasado Santiago Arias.
Incluso, con el nuevo sistema que propuso el Cholo jornadas atrás (3-5-2), ha conseguido explotar al máximo exponente sus virtudes ofensivas. El guante que Trippier posee en su pie derecho, es sinónimo de gol y así lo demostró ayer ante el Valladolid. Proporcionó dos asistencias; una a Thomas Lemar y otra a Marcos Llorente.
En la primera, tensó un centro raso al segundo poste para que el galo terminase su negativa racha de cara a portería. Y en el segundo, Trippier optó por una acrobacia en forma de pase al hueco, que Llorente supo aprovechar. Las sensaciones de Trippier liberado de tareas defensivas son más que positivas y estaremos espectantes por ver su desarrollo en dicho lugar.