Tras unos años de crecimiento frenético, incluso llegando a Europa, comienza una etapa de reestructuración del proyecto de los Wolves
De más a menos
En 2016, cuando los Wolves estaban en Championship, la segunda división del fútbol inglés, el conglomerado chino Fosun, compró el conjunto de West Midlands. En la 17/18 lograron el ascenso a Premier League tras una gran inversión, con la que terminaron en 7º lugar en su regreso a primera.
De esta forma, jugaron Europa League, cayendo en cuartos de final frente al campeón de la competición, el Sevilla. Así, todo hacía indicar que los Wolves, junto con el Leicester, lucharían por hacerse un hueco en ese ‘Big Six’ en los próximos años.
Sin embargo, como hemos visto, no han corrido la misma suerte ambos equipos. Los ‘foxes siguen en Europa y ganaron títulos como la FA Cup y la Community Shield y los ‘lobos’ están en caída libre y estancados en la media tabla baja.
Nuevo proyecto, nuevos objetivos
Con la salida de Nuno del banquillo de los Wolves y la contratación de Bruno Lage, comienza una nueva vida en Wolverhampton. Esto es así por la doble diferencia tanto en la inversión que rodeaba al actual entrenador del Tottenham como con el estilo de juego.
Al contrario que los grandes dispendios económicos que desembolsaron ‘los lobos’ con Nuno entre fichajes de gran nombre y representados por Mendes, con el actual técnico apenas ha habido las suficientes incorporaciones para suplir carencias claras.
Las incorporaciones de este año son José Sá, que llegó porque Rui Patricio se fue a la Roma, Yerson Mosquera como central de futuro debido a sus 20 años de edad y Rayan Aït Nouri lo hace porque era crucial fichar otro lateral izquierdo debido a la lesión de Jonny.
Trincao viene cedido para darle profundidad a los extremos y Hee Chan para reforzar la punta de ataque y aumentar la cifra goleadora. El gol es algo muy necesario que está echando en falta el conjunto del Molineux.
Llevan cero goles a favor porque todo depende de Raúl Jiménez aunque no se sabe exactamente como estará de salud el mexicano. Y por su parte, Fabio Silva no te garantiza ninguna cifra anotadora por su juventud.
Así, se queda un equipo que, aunque no tendrá muchos problemas aparentes para salvarse, tampoco tendrá ninguna aspiración más. Por ende, tenemos un equipo que ha cambiado de entrenador y de estilo de juego, se ha reforzado con lo justo y en algunas posiciones tiene jugadores o demasiado veteranos o demasiado jóvenes.
Equipos como Aston Villa, Everton, Leeds y el propio Leicester, han adelantado a los Wolves como proyectos, a priori, más ilusionantes. No obstante, las 3 derrotas sufridas en los 3 primeros partidos, pueden poner nerviosos a los fans y a los propios jugadores.
Esto es caldo de cultivo para que el puesto de entrenador tiemble y de ahí comience una inestabilidad que puede meter en serios problemas a los Wolves, viendo como han comenzado algunos equipos candidatos al descenso como el Brentford o Brighton.