El canterano rojiblanco cumplió uno de sus sueños al debutar con el primer equipo tras 14 años en el club
El pasado 20 de noviembre será una fecha que Carlos Martín no olvidará jamás. A sus 19 años, puede decirse que cumplió el sueño de su vida debutando con el Atlético de Madrid. En el partido frente a Osasuna, mientras todos sus compañeros buscaban a contrarreloj el gol de la victoria, el delantero calentaba en la banda. A Simeone ya solo le quedaba un cambio y, realmente, él era el jugador más ofensivo en el banquillo. El Cholo decidió, entonces, sustituir a Sime Vrsalijko por Carlos Martín en el minuto 85 para ocupar esa banda derecha. Fue en el 87 cuando Felipe Augusto marcaba el gol de la victoria y el recién debutado pudo celebrarlo con sus compañeros.
Destellos de calidad
A pesar de disputar muy pocos minutos, le dio tiempo a dejar pinceladas de lo que puede llegar a ser. Se fue de Manu Sánchez con habilidad, dejó algunos regates destacados y se aplicó en tareas defensivas tras el gol de Felipe hasta que el partido terminó. El joven delantero se dejó la piel en esos últimos minutos y no desentonó con el resto de sus compañeros. Todo lo que el Cholo pedía.
Sigue creciendo en la Tercera RFEF
Esta temporada está jugando en el Atlético de Madrid B, en 3ª RFEF, y cada jornada que pasa está ganando más peso en el equipo. Es uno de los máximos goleadores del Grupo 7 de la categoría con 5 goles, cuatro de ellos logrados en este mes de noviembre que está siendo mágico para él, con numerosas convocatorias en el primer equipo.
De hecho, poco más de 12 horas después de jugar contra el Osasuna, el atacante entraba en el once inicial del Atlético de Madrid B que se enfrentó al CDC Moscardó en el Román Valero. Su entrenador Luis García Tevenet no tuvo problemas a la hora de ponerle como titular, pues es un jugador que debe seguir creciendo y la mejor manera de hacerlo son los minutos y la confianza. De ello depende que Simeone lo vuelva a tener en cuenta.
En definitiva, Carlos Martín ha crecido en la cantera rojiblanca, de la que no se ha movido desde que entró hace 14 años. Ahora, ha cumplido su sueño. Dejó buenas sensaciones y mucho descaro, demostrando que quiere ser una pieza clave en el futuro colchonero.