El entrenador vigués se convierte en el nuevo inquilino del banquillo canario tras la destitución de Luis Carrión
La temporada de la UD Las Palmas está teniendo un inicio desastroso. Tras las primeras 9 jornadas, el conjunto canario continúa sin conocer la victoria y tan solo acumula 3 puntos que le han condenado a ser el farolillo rojo de la competición. Sus escasos 3 empates ante Sevilla, Real Madrid y Real Betis le dejan ahora mismo a 5 puntos del CD Leganés, que marca los puestos de salvación. Este mal inicio ha terminado con la destitución de Luis Carrión como entrenador del conjunto amarillo, que ya ha encontrado un sustituto de forma inmediata y aprovechando el parón de selecciones.
Carrión llegó este verano a Gran Canaria después de una gran temporada en el Real Oviedo donde rozó el ascenso con los asturianos. A priori, y a pesar del mal inicio liguero, el catalán contaba con la total confianza por parte del club y así se expresaba desde la dirección canaria. Sin embargo, con la llegada del parón de selecciones y después de no cosechar ni una sola victoria, se ha optado por la salida del entrenador en busca de un cambio de dinámica que les meta de lleno en la pelea por la salvación. Ya que con el rendimiento mostrado hasta ahora, el club parecía destinado a un descenso inevitable.
El elegido para el puesto ha sido Diego Martínez, quien tendrá este parón de selecciones la oportunidad de trabajar con el equipo en busca de asentar sus ideas y estilo de juego. El que fuera entrenador del Granada, con el que consiguió la clasificación a competiciones europeas, ha tenido también pasos no tan exitosos por Espanyol y Osasuna. El gallego tendrá ahora la oportunidad de volver a la élite del fútbol de la mano de los canarios con un contrato que le unirá a la entidad amarilla hasta final de la presente temporada. Sin embargo, en caso de conseguir mantener al equipo en Primera División, su contrato se extenderá por una campaña más.
