12 años, 2 meses, 8 días, 1 hora y 15 minutos después, el Espanyol volverá a sentir la pasión de jugar en Europa.
Fuente: RCD Espanyol
El jueves, luchará por entrar en el “business class” de Europa, al que el equipo no pertenece desde que, con el probablemente el mejor Espanyol de la historia, rozaron la gloria en la final del 2007 ante el Sevilla.
Esas dos temporadas fueron la época dorada del club. En el 2006, los pericos se alzaron con La Copa del Rey en esa mágica final para los aficionados pericos. Fue el 12 de abril del año mencionado, cuando el Espanyol llegaba a la final tras eliminar a el Deportivo por 2-1 y 0-0. El rival, el Zaragoza, que venía de eliminar al mismísimo Real Madrid por 6-1 y 0-4, el último perdiéndolo en el Bernabéu. El equipo venía más de cara a la final tras esas geniales semifinales, pero no fue como se esperaba. Los blanquiazules se llevaron el trofeo con una cómoda victoria por 4-1, con dos goles de Luis García, uno de Tamudo y otro de Corominas.
La temporada siguiente, el sueño espanyolista seguiría tras llegar a la final de la Europa League. El equipazo con el que contaba el Espanyol por ese entonces hacía soñar a lo grande. Jugadores como Tamudo, De la Peña, Zabaleta, Iraizoz, Dani Jarque, Albert Riera, Corominas, Luis García o Walter Pandiani, máximo goleador de la competición con 11 goles, formaban aquel equipo.
Fuente: Sevilla FC
El partido no empezó bien, Adriano adelantaba a los sevillanos en el 18’. La ventaja no duró mucho, cuando Albert Riera ponía las tablas de nuevo a los 10 minutos. El partido transcurrió sin goles hasta el minuto 105’ de la prórroga, cuando Fréderic Kanouté adelantó a los andaluces. Pero nuevamente el equipo de la ciudad condal no tardó en igualar el partido, justamente diez minutos, de la mano del recién entrado, Jônatas. El partido llegó a los penaltis, donde el equipo capitaneado por Tamudo sólo anotó 1, Pandiani, de 4 que tiró. Fallaron Luis García, Jônatas y Marc Torrejón. El Sevilla estuvo más fino y anotó 3 de de 4 que tiró, Dani Alves erró. Y con la miel en los labios del título europeo, acabó la época dorada dirigida por Ernesto Valverde.
Ahora, 12 años después, el Espanyol de Diego López, Javier López, Borja Iglesias, Iturraspe, Marc Roca, Melendo, Ferreyra, Vargas, Espinosa… quieren reavivar la llama de Europa tras unos años complicados. Ayer ante el Stjarnan Gardabae islandés, la nueva generación ganó cómodamente por 4-0 en su estadio. Aunque a los pericos se les atragantó los islandeses en una primera parte que acabó 0-0, la segunda parte se desarrolló sin dificultades para los de David Gallego. En la segunda mitad, una sociedad se formó en el verde, el sueño de cualquier aficionado perico, Iglesias y Ferreyra, los dos delanteros en la formación 4-4-2, se unieron para solucionar el partido con dos cada uno. Además de que se asistieron mutuamente también.
Fuente: RCD Espanyol
Gran partido de Pedrosa que se estrenaba con el número 3, poniendo un magnífico centro al Chucky que se mostraba mortífero con la cabeza para abrir el marcador. En el segundo, el argentino cazaba un pase con la cabeza del número 7. Luego llegaron los goles del gallego. El primero una gran jugada en solitario en la que se zafa de la marca de sus rivales en el borde del área y pone un tiro fuera del alcance del portero. El segundo, se quita el sombrero de mago para cargar la escopeta de “killer” y tras una gran jugada colectiva en la que Pedrosa ponía un pase en profundidad a Wu Lei, que combinaba con Ferreyra, el cual sorprendió con un pase de tacón, que aprovechaba el panda para poner el 4-0.
Un partido con un gran despliegue goleador, que también muestra el gran juego colectivo que ha dejado el conjunto barcelonés. Además de mostrar que tiene jugadores de sobra que pueden cambiar el partido, como Wu Lei, que con sus despliegues al entrar el Espanyol pudo marcar 3 goles más. Pero no sólo en ataque, en el centro del campo, si es necesario aguantar un resultado, puede entrar Iturraspe para poner el candado, junto con Marc Roca, al centro del campo.