El extremo alemán, Leroy Sané, tiene pie y medio fuera del Manchester City. Y el conjunto inglés ya le busca un recambio de garantías.
El pasado verano, Leroy Sané estaba ya con la mente en su nuevo equipo, el Bayern de Múnich. Sin embargo, por la grave lesión del alemán, el club de la Bundesliga perdió el interés en acometer su fichaje, y la operación se canceló.
Ahora, con la vuelta del alemán cada vez más cerca, vuelve a sonar con fuerza su salida dirección Alemania. Allí, Sané podría ocupar el puesto de Kingsley Coman, que nunca ha podido llegar a asentarse, debido a sus problemas físicos.
Leroy llegó al Manchester City en el verano de 2016, por cerca de 50 millones de euros. Teniendo en cuenta que su valor actual es de 100 millones de euros pero, acaba contrato en 2021, una oferta que roce el valor de mercado sería ideal, para que el City pueda encontrar un sustituto a la altura del propio Sané.
Esta temporada, sin Sané, Pep Guardiola ha alineado a Sterling con Bernando Silva o Mahrez aunque, con la probable salida de David Silva en el centro del campo y, la clara tendencia de Bernando de ocupar ese puesto, el Manchester City deberá contratar a algún jugador que pueda desempeñarse como extremo y, cumpla los requisitos de Guardiola.
Si bien puede parecer algo fácil, Pep Guardiola ha sido muy selecto contratando jugadores en el club inglés, especialmente en bandas, necesitando conocer de manera exacta aquellos jugadores que contrata para dicha posición. Hasta el punto de controlar completamente su juego en todas las situaciones posibles y, tras ello, decide.
Sin duda, basándonos en dichas “exigencias”, el mayor candidato para reforzar a los Cityzens es Mikel Oyarzabal, extremo zurdo de 22 años que se desempeña en la Real Sociedad. El jugador vasco tiene un valor de 60 millones de euros y, una cláusula de 80 millones de euros.
Otra opción que también ha sonado, aunque sería un fichaje sorprendente es el portugués Diogo Jota. Tiene un valor de 35 millones aunque, según se dice, los Wolves no aceptarían una oferta inferior a los 55 millones de euros. El portugués atraviesa una de sus mejores etapas y, su club buscaría aprovechar económicamente esa condición.