A falta de una jornada Boca se halla segundo, un punto por debajo que River, el puntero de la Superliga.
Boca disfruta de un espléndido momento de forma y parece que Russo está dando con la tecla. Pese a todo, los buenos resultados no son suficientes, ya que los ‘Xeneizes’ están jugando contra la cronología.
Las cuentas son claras, ganar el partido que queda (en la Bombonera y contra Maradona) y que River pierda su encuentro restante (Atlético Tucumán de visitante). Ambos partidos se disputarán a la misma hora el próximo domingo 8 de marzo.
Como en los últimos años, los astros se reagrupan para ofrecernos un final de liga apasionante. River se encuentra un paso por delante dependiendo de ellos mismos, motivo más que suficiente para ilusionarse con la ‘vuelta’. Boca, a tan solo un punto, también mantiene la esperanza intacta, ya que con las últimas 5 victorias pudieron reducir considerablemente la distancia. Los más grandes tienen con que soñar.
La situación de Boca Juniors:
Sin duda un punto de inflexión fue la eliminación en la Copa Libertadores de la mano de River Plate. Eso acarreó no solo un cambio en el banquillo, sino también en la directiva.
La llegada de Ameal y Riquelme en el palco significó la salida de Alfaro. Su sustituto, Miguel Ángel Russo, el último técnico ‘xeneize’ campeón de la Libertadores.
Boca atraviesa un momento dulce con 5 victorias al hilo con las que se ha posicionado segundo y a tan solo un punto de la cabeza. Los jugadores se sienten cómodos con el sistema de juego y los resultados lo reflejan.
Sebastián Villa y Carlos Tévez atraviesan su mejor momento en el club. Villa haciendo gala de su velocidad y desborde y Tévez en su mejor momento desde que volvió a La Boca de la Juventus en 2015.
Ese Tévez que vino de disputar una final de Champions contra el Barça, ese Tévez que podía jugar 70 partidos y seguir marcando la diferencia con su esfuerzo y jerarquía.
Hoy con 36 años la realidad es otra, ya no cuenta con tantas responsabilidades, pero sin duda está recuperando su mejor nivel desde que volvió de China en 2018 y a base de goles (5 goles en 5 partidos) está recuperando la memoria de la gente.
Boca parte con la ventaja de cerrar la temporada en casa y con un gol tempranero podría meter presión a River, que juega su partido simultáneamente. Si quieren dar la ‘vuelta’ en La Bombonera, están obligados a ganar a Gimnasia y que River no salga victorioso de Tucumán.
Situación de River Plate:
La sensación es agridulce en El Monumental. Después del empate ‘in extremis’ frente a Defensa y Justicia en casa, saben que no pueden fallar frente al ‘Decano’. El propio entrenador, Marcelo Gallardo, se retiró frío del encuentro pidiendo ánimos a su gente.
La ventaja es mínima pero River sigue dependiendo de ganar en Tucumán, tarea difícil ya que el equipo no acaba de sentirse cómodo jugando de visitante y que los locales encuentran su punto fuerte en casa.
Otra opción sería que Boca no logré vencer a Maradona y sus ‘lobos’, en ese caso, cualquier resultado sería válido para ‘el Millo’.
¿Desempate?
Acorde con el artículo ocho del reglamento del torneo de la SAF, “en caso de empate en puntos en el primer puesto de la Tabla Final de Posiciones”, se organizaría una final entre el primer y segundo clasificado.
Esta opción se daría si Boca empata contra Gimnasia y River pierde su partido, ya que ambos sumarían 46 puntos.
Un desempate es la opción deseada por todo amante del fútbol, una nueva batalla por la gloria entre una de las mayores rivalidades de la historia del fútbol. Pagaría por verlo.