Riqui Puig, Álex Collado y Monchu Rodríguez forman juntos la fórmula ideal para que el FC Barcelona B viva una gran temporada, acercándose cada vez más a Segunda División
Riqui Puig, el motor
Cada uno tiene un rol específico en la orquesta en la que está convertido el equipo de García Pimienta. El primero de ellos es Riqui Puig, menos trascendental de cara a portería o asistiendo, pero siendo él el encargado de recibir casi todos los balones que pasan por el mediocampo para empezar a generar peligro.
Riqui, nacido en Matadepera, llegó a Barcelona en 2013 siendo un cadete, procedente del Jàbac de Terrassa. Con el Juvenil A conquistó la UEFA Youth League en la temporada 2017/18 junto a Collado y Monchu, además de otros jugadores actuales del Barça B, equipo en el que juega, de forma oficial, desde la temporada pasada.
En la vigente campaña ha jugado 24 partidos, anotando 2 goles y dando 3 asistencias. En cuanto a números, Riqui es el menos trascendental de los tres protagonistas. Sin embargo, es al que más le gusta tener el balón. El juego siempre fluye gracias a él, ya que es muy bueno conduciendo el balón y leyendo los partidos. Mide 1,69 m, por lo que parecería un jugador débil, pero no lo es. El trabajo de proteger el balón trabajado en La Masía está muy reflejado en Puig, a quien es muy difícil robarle el esférico, ya sea por su velocidad o habilidad con el balón en los pies.
Álex Collado, el factor sorpresa
Turno del extremo por derecha de García Pimienta: Álex Collado. Nacido en Sabadell, es azulgrana desde la categoría de Alevín, procedente del fútbol base del Espanyol. También forma parte del Barça B desde la temporada 2018/19.
Con 25 partidos en la actual campaña, Collado suma cinco goles y cinco asistencias. Siempre pegado a la banda derecha, es el genio de la pierna cambiada de Segunda B. Regateador, acostumbrado a jugar en corto y siempre buscando recortar hacia dentro para que su zurda brille de cara a puerta. Sus movimientos con y sin balón son de jugador profesional, tirando constantes desmarques de ruptura y permitiendo que sus compañeros hagan lo mismo para ser él quien les filtre pases milimétricos entre la línea de defensas. Es el más ofensivo de los tres, y el que más pone a prueba a los arqueros rivales.
‘Monchu’ Rodríguez, el capitán
Sin embargo, el goleador es Ramón Rodríguez ‘Monchu’, el capitán del equipo. El mallorquín ingresó a La Masía en 2012, empezando en el Infantil A. Su trayectoria en el Barça B empezó la temporada pasada, jugando la sorprendente cantidad de 2.385 minutos, lo que demuestra que García Pimienta confía plenamente en él.
Ha disputado 26 partidos en la actual temporada, anotando ocho goles y dando tres asistencias. Es el máximo goleador del equipo, anotando su último tanto la jornada pasada. Como cualidad principal está su carácter de profesional. Con la lesión de Ferrán Sarsanedas, Monchu ha portado el brazalete de capitán esta temporada, de manera muy digna. Es un guerrero elegante. Además de disputar con criterio todos los balones que circulan en el mediocampo, tiene un toque y control del balón muy finos, y, por supuesto, una gran finalización, especialmente desde el punto de penati o en los tiros libres.
Los tres futbolistas tienen la misma edad: 20 años. Riqui y Collado ya saben lo que es jugar en el primer equipo, mientras que Monchu no ha tenido la misma suerte que sus compañeros.
El trío de oro del filial barcelonista sueña con ascender a Segunda División y así tener todavía más oportunidades de pasar a formar parte, de forma oficial, del primer equipo de los culés. Méritos para hacerlo no les faltan.
