El internacional español tuvo que abandonar el estadio en camilla tras el enfrentamiento contra el Chelsea.
En la noche de ayer se enfrentaban Valencia CF y Chelsea en Mestalla, en un partido de vital importancia de cara a la clasificación para octavos de final de la Champions League y que finalmente se saldó con empate a dos.
Este resultado obliga a los de Celades a ganar en Ámsterdam, o esperar a que los londinenses pinchen contra el Lille.
El choque fue apasionante, sobre todo para el público neutral. Tanto locales como visitantes pelearon con todas sus fuerzas para llevarse la victoria, pero finalmente no pudo lograrse. Tanto Kepa como Cillessen fueron protagonistas, cada uno en su portería.
Uno de los que más peleó fue José Luis Gayá. El de Pedreguer no paró de subir y bajar la banda izquierda, siempre con buen criterio. El valenciano fue protagonista de dos de las jugadas más destacadas del partido.
La primera el penalti, que él provoca y que más tarde falla Parejo, y la segunda el fallo garrafal de Rodrigo al final del partido, que tenía que empujar con la derecha un centro medido del de Pedreguer pero que finalmente no lo hace.
Tras el pitido final, Gayá tuvo que abandonar Mestalla en camilla, tras sufrir una lipotimia, fruto del desgaste y el gran número de minutos recorridos durante el vibrante encuentro que nos brindaron ambos equipos.