El argentino ha firmado un gran inicio de liga y el técnico ha afirmado que será fundamental en la idea de juego que tiene para hacer grandes cosas en el Betis
Guido Rodríguez ha empezado la temporada incluso mejor que como acabó la pasada. Llegó al Betis en el mercado invernal pagando el conjunto verdiblanco 4,5 millones por el 70% de los derechos del jugador con la intención de reforzar la posición del mediocentro. Era la posición que más flojeaba y en la que más problemas tenía Rubí ya que William Carvalho se lesionó de gravedad y Javi García no daba el nivel.
Rendimiento
Empezó en el Betis con mañas actuaciones el curso pasado. Fallaba sobre todo en la salida de balón, haciendo giros raros y dando pases absurdos. Tampoco mostraba la contundencia que ahora si hace en el juego sucio. Incluso Rubí lo sentaba en el banquillo porque no ofrecía el rendimiento esperado.
En la vuelta al fútbol, tras el parón, su nivel empezó a subir y se hacía cada vez más importante en el equipo. Llegó el cese de Rubí y con la llegada de Alexis siguió siendo importante. Aportó incluso goles. Daba la sensación de que el fichaje del argentino se iba a rentar deportivamente, pues el ex de Ámerica también era fijo en las convocatorias de la selección argentina.
Ya en la pretemporada de la presente campaña ya se esperaba que diera un paso al frente. Este será su primer año completo en el Betis y hay muchas esperanzas puestas en él. De momento, ha sido de los mejores en los amistosos y el mejor en el primer partido del Betis en liga ante el Alavés, mostrando una gran versión en el robo de balón y un gran disparo lejano que se estrelló en el larguero. Guido Rodríguez tiene mimbres y galones para ser capitán verdiblanco en un futuro.
