Con su reconversión a carrilero diestro, y vistas sus últimas actuaciones, muchos se preguntan si estamos ante su mejor versión
Con la llegada de Pablo Machín, el tinerfeño ha sido el escogido para desempeñar una función para la que muy pocos le veían candidato. Tal y como es habitual en él, el entrenador soriano introdujo en el Alavés la figura de dos carrileros con su llegada al banquillo. Por otra parte, la plantilla contaba con el inconveniente de no tener adeptos de nivel para dicha posición. Es por ello por lo que hasta última hora se han tenido dudas acerca de quien ocuparía dichos huecos. Sorprendentemente, Edgar ha sido uno de los escogidos, en este caso, para el derecho.
Dada su vocación predominantemente ofensiva, era fácil creer que su función podría verse ligada a ser la del acompañante del punta en ataque, con menor protagonismo que el que tuvo la temporada anterior. Sin embargo, desde que empezó la temporada, su lugar ha sido el carril diestro donde, jugando en su banda natural, ha rendido a un buen nivel. Cabe destacar su desempeño en la última jornada disputada. En parte, gracias a él, su equipo logró llevarse los tres puntos ante el Athletic en Mendizorroza. Incluso ha conseguido estrenar su casillero goleador esta temporada. Sin embargo, de poco sirvió, ya que el Deportivo Alavés cayó derrotado por 3-1 en dicho encuentro ante el Villarreal CF.
Édgar Méndez, entrenando con el Deportivo Alavés. Fuente: Twitter @edgarmendez
Segundas partes, ¿Nunca fueron buenas?
Sin lugar a dudas, la de Édgar está siendo una de las grandes sorpresas de la temporada, y quien sabe si terminará por ser una jugada maestra de Machín en un mercado en el que encontrar un candidato para desempeñar esa labor ha terminado por ser una misión imposible. Recordemos que Édgar era conocido por ser un extremo de clara vocación ofensiva, muy vertical y diagonal a pierna cambiada.
Desde que llegó el pasado mercado invernal desde el Cruz Azul, se empeñó en invalidar el tópico añadido al fútbol que dictamina que las segundas partes nunca suelen ser buenas. En su primera etapa como babazorro brilló y acabó jugando una final copera. Ahora, con su nuevo rol, y teniendo en cuenta el pronóstico crítico que muchos ya le auguran a este equipo, si es capaz de mantener este nivel con el que ha comenzado la temporada, quedará muy lejos de confirmar el tópico con su caso.
