Andriy Lunin aún espera su oportunidad de debutar con el Real Madrid en competición oficial algo que podría estar cerca
En 2018, el Real Madrid fichaba a un joven guardameta prometedor del Zorya ucraniano. El club merengue se hacía así con una de las mayores promesas del panorama europeo. Tras un gran desembolso de 8´5 millones de €, habían logrado la contratación de Andriy Lunin, cancerbero formado en el Dnipro y que mostró un gran nivel en el Zorya. Desde entonces han pasado ya 3 años y el joven no ha tenido la oportunidad de demostrar sus cualidades en ningún partido oficial.
El Real Madrid cedió por una temporada a Lunin al CD Leganés, donde dejó un buen sabor de boca en los 7 partidos en los que tuvo que intervenir. Aún así, no pudo tener la regularidad esperada y la siguiente temporada saldría cedido al Real Valladolid, donde tampoco tendría oportunidades. En el mercado invernal, el club merengue lo repescaría y lo cedería al Real Oviedo de Segunda División. Con los asturianos si tendría regularidad y dejaría un rendimiento más que notable. Para esta temporada, Zinedine Zidane decidió darle la oportunidad de ser el segundo portero del equipo, pero por el momento no ha tenido ni una sola oportunidad.
Esta situación podría cambiar en los próximos tiempos, y es que el joven ucraniano podría tener su oportunidad en la Supercopa de España y en la Copa del Rey. Los blancos tendrán este jueves un duelo frente al Athletic Club en las semifinales de la Supercopa, y quien sabe si Zidane podría apostar por el joven guardameta. De no ser así, el joven portero tendrá, presumiblemente su oportunidad frente al Alcoyano en Copa del Rey. Podría así, y tras 3 años de espera, tener la oportunidad de debutar de forma oficial con el Real Madrid.
Análisis de juego
Siempre es difícil realizar un análisis de juego de un portero, porque a diferencia de los jugadores de campo, su función es bien distinta. La función prioritaria de un guardameta es la de evitar que su equipo encaje goles, aunque ahora se está cogiendo la tendencia de involucrar a los guardametas en funciones de salida de balón. Sin embargo, Lunin cuenta con todas las cualidades que debe tener un portero del siglo XXI.
Lunin destaca principalmente por sus condiciones físicas, y es que a pesar de su gran estatura (1´91 m) estamos hablando de un portero rápido y con gran agilidad. También es un guardameta que brilla por sus reflejos, tanto a ras de suelo como en sus estiradas. Su velocidad y agilidad le convierten en especialmente efectivo en las segundas jugadas provocadas por un rebote o un mal rechace. Lunin, aunque no destaca por ello, no es un portero reacio a jugar con los pies; pues en su etapa en Ucrania ya dejó buenos pases tanto largos como cortos así como recortes y regates a delanteros que acudían a la presión.