Gran jornada en el tenis femenino español en las Olimpadas que nos ha regalado un pleno de victorias y una gran sorpresa
Parece que las mujeres, se han mentalizado y conjurado de que pueden lograr grandes cosas en estos juegos Olímpicos tan atípicos y hostiles. Si bien es cierto que aun es pronto para vaticinar algo, lo cierto es que las 4 tenistas han dejado buenas sensaciones en sus partidos.
La gran triunfadora de la jornada de tenis de esta madrugada, ha sido sin embargo, Sara Sorribes que ha ganado a la actual número 1 del mundo y principal favorita para tocar el metal en la cita japonesa y queda eliminada de la modalidad individual. Este tipo de cosas son las que engrandecen al deporte de la raqueta.
Garbiñe Muguruza (ESP) vs Veronika Kudermetova (COR)
El partido tenía lugar por la madrugada y Garbiñe se enfrentaba a la rusa (número 33 del mundo) Veronica Kudermetova.
En la cancha, a parte de su rival, aguardaba como siempre el invitado molesto de la fiesta: el sol abrasador, tal y como ya le ocurriera ayer a la también española, Paula Badosa y que parece que va a acompañar a las tenistas a lo largo del torneo. Un hándicap que se debe tener en cuenta, pero que no debe servir como excusa en caso de malos resultados.
Sorribes, le hizo un favor a la vasca pues le despejó el cuadro , tras vencer a la australiana, Asleigh Barty, actualmente, la tenista, más temida del mundo.
Volviendo al partido que nos ocupa, se puede decir, que era el típico que parecía a priori fácil, pero en el que debes permanecer atenta todo el rato, ya que se te puede complicar como bajes la guardia o te confíes y eso mismo es lo que le paso a la hispano-venezolana. Pero no es novedad.
Aunque, también cabe destacar, que en estos primeros duelos, conviene, no desgastarse demasiado para llegar con energía y fuerza a los ‘platos fuertes’– valga la redundancia-.
Primer set
El partido se decantó, gracias a la diferencia de talento de la española y donde el primer set se estiró más de lo debido, un escenario que no es nuevo para ella.
Como se decía, no es novedad que Muguruza se duerma en los laureles y esta vez, no fue menos, se repitió una especie de historia interminable en su juego y una peligrosa tendencia que se repite con bastante asiduidad: complicar el partido, cuando no lo es.
La cosa es que vencía plácidamente por 0-4, pero tras este marcador, no se sabe que especie de ser maligno imbuye a la número 9 del ránquing WTA que la hace pecar de confianza o de no se sabe qué y de repente, fue la igualdad la que empezó a merodear el duelo.
Llego el 2-4 y con él, la tensión y varios de los fantasmas habituales, contrarrestó, 2-5, pero en un arranque de valor, Kudermetova, empató a 5, una manga que tenía perdidísima. Al final y no sin dificultad, el set se decantó del lado de la tenista que esta vez, vestía con camisa roja y pantalón blanco.
Segundo set
Parecía el día de la marmota, o más bien, el partido de la marmota, pues el resultado, a la postre, fue calcado al del set inicial, no así, el desarrollo del mismo.
En este, las tornas cambiaron, pues a partir del 2-2, la balanza se desniveló, fruto del peso que le puso la tenista del norte de Europa. La masa que reflejaba la balanza era de 4-2 a su favor, mal asunto para Garbi. Sin embargo, esta vez fue Garbiñe la que remontó.
Le ganó tres juegos seguidos, hasta poner las tablas: 5-5. Llegaba el momento de la verdad y la española respondió con maestría, rompiéndole el servicio a la rusa en el juego definitivo, para terminar ganando el partido por 5-7.
Es impredecible e inentendible el patrón de la vasca, como su juego, que es irregular pero que cuando está abajo, es capaz de darle la vuelta a la tortilla y viceversa, cuando está en lo más lato, hundorse. Curioso su ‘modus vivendi’. Pero es algo que debe mejorar, de cara a futuros enfrentamientos, y más en unos Juegos Olímpicos.
Mañana le toca enfrentarse a la china Wang Qiang, en una contienda que tendrá lugar como ya está siendo habitual, por la madrugada, a partir de las 4:00 hora peninsular española y que corresponde a los octavos de final del torneo. Veremos si nos despertamos con una alegría.
Carla Suárez (ESP) vs Ons Jabeur (TUN)
Al contrario que su compatriota, Carla Suárez, se deshizo de su contrincante por la vía rápida imponiéndose por 6-4 y 6-1, en un partido que no tuvo más trascendencia que la victoria de la española y que confirma que ha vuelto a su mejor nivel.
La canaria, vuelve a ganar un encuentro en solitario, 18 meses después y la verdad res que el escenario elegido, no podía ser mejor. Si bien es verdad que ayer, ya había debutado con victoria, lo cierto es que fue en dobles y con Muguruza.
Ella, siempre había dicho a lo largo de la previa, que estar en los Juegos ya era un premio y que se lo tomaba como un regalo de la vida, porque ella ya había ganado. Y apuntaba también que prácticamente no había tenido tiempo de entrenar. Pero los grandes deportistas, los que llevan toda la vida haciendo de su profesión el día a día, tienen esto, que son capaces de regalarte una exhibición sin apenas rodaje. 64 minutos, dieron fe de ello.
En dieciseisavos la espera, la checa Karolina Pliskova, finalista del último WTA 1000 de Roma, disputado en mayo.
Será un encuentro difícil, pues la checa es una tenista que es bastante rocosa, que tiene una gran envergadura, un gran talento y que cuesta de vencer.
El partido tendrá lugar a la misma hora que el de su compañera de selección.
Sara Sorribes (ESP) vs Ashleigh Barty (AUS)
Sin duda, lo mejor para el final. Una de las mejores noticias en lo que va de Olimpiadas, en lo relativo al tenis ha sido la derrota de la australiana Barty, actual número 1 y reciente ganadora de Wimbledon, a manos de Sara Sorribes ( la 48 del mundo), quien además redondeó su día con la victoria en los dobles, compartiendo pareja con Paula Badosa.
Disputar dos encuentros en un día y conseguir un pleno de victorias, no es algo que suceda a menudo y mucho menos, en unos Juegos Olímpicos.
Lo que más sorprende del partido, es el cómo lo afronto la atleta castellonense de 24 años, pues salió a la pista a jugar sin presión, sabiendo que no tenía que perder y mostrando un tenis muy valiente, digno de admiración.
No acusó los nervios ni por el escenario, ni por la entidad de su oponente y los factores claves de su victoria fueron que supo contrarrestar el drive de la australiana- su mejor baza, de largo- y que supo jugar sus cartas y aprovechar las oportunidades que le brindó la número 1 del ranquin WTA.
El partido demandaba dos cosas: la primera, que Sara jugara a su mejor nivel y la segunda, que la suerte estuviera con ella, Ergo Barty, tuviese un mal día. El ‘combo’ no pudo salir mejor.
Detalles reseñables del partido
Como se comentaba en párrafos anteriores, la jugadora de 24 años, no dejaba que la de Ipswich progresara con su derecha , que se sintiera cómoda con su golpe fetiche. Construyó una telaraña en la que su rival cayó, cual mosquito en la maraña de hilos, tejida a través de una sarta de reveses cortados que desesperaron a Ashleigh y que servían para mermar su moral y repeler sus golpes maestros.
El plan funcionó a las mil maravillas, porque a la campeona de Wimbledon, le entraron los nervios y la impotencia e impaciencia se apoderaron de su ser. No obstante, por algo es la mejor y logró sobreponerse a un contundente y trepidante 1-4 inicial.
Efectivamente, lo llevó al empate a 4 unidades, pero ella, no sabia que hoy era el partido de Sara y nada la detendría. No se descompusó a pesar de que le levanto dos bolas de set en acciones de ojo de Halcón. Así pues, 4-6 y primera manga solventada, con relativa comodidad, gracias a un tenis heterodoxo y de resistencia que sacó del partido a Barty, que fue una máquina de cometer errores y de tomar malas decisiones. Justo en el día D a la hora D.
Segundo set
En el segundo set, la australiana no reaccionó y siguió atrapada en sus errores. Sorribes aprovechó este inmejorable contexto para creérselo ya agigantarse. Cuando a un deportista se le presenta una oportunidad así, en un escenario así, la tiene que atrapar, y ella lo hizo a las mil maravillas.
Con el 3-3, el partido se rompió de nuevo y a la castellonenense tampoco le entró el miedo a ganar cuando perdió los dos primeros match-balls, como en la primera manga.
Al final el set agonizó con un contundente 3-6. Una victoria, que a buen seguro, quedará para siempre grabada en su retina. Ya tiene su foto, ya tiene un recuerdo inolvidable de su hazaña en Tokio. La liquidó en hora y media. No necesitó más.
Tras el partido dijo que ” estoy muy contenta y todavía no me creo que haya ganado a la número 1 del mundo”. El tenis, te brinda sorpresas y alegrías como estas. Es la gracia del deporte.
Mañana le espera la francesa Fiona Ferro también a partir de las 4:00 horas de la madrugada. Visto lo visto, vale la pena levantarse del colchón para seguir la andadura de esta menuda tenista.
Dobles: Paula Badosa / Sara Sorribes (ESP) VS Renata Zarazua / Giuliana Olmos (MEX)
El duelo de dobles, fue bastante sufrido, ya que se resolvió en tres sets muy largos (6-2/ 6-7 y 10-7) y tras 1 hora y 42 minutos de juego. Ayudó el que ambas se conocieran de formar pareja en torneos anteriores (Wimbledon) y que sean amigas desde los 14 años.
El partido ante las mexicanas fue muy sufrido a pesar de que empezó muy bien el equipo español, con un 6-2 inicial.
Veremos si esto le pasa factura a Sara en el corto plazo, que a pesar de la alegría, ha disputado dos partidos de forma muy seguida.
El tenis femenino español, termina la jornada con pleno de victorias. Así da gusto.