El central de 23 años llega al club blanquinegro procedente del Getafe CF en calidad de cedido para esta nueva temporada
El Burgos se encuentra trabajando incesantemente en este final de mercado para encontrar las piezas que le faltan. Hace apenas unos días cerró la cesión de Álex Alegría, delantero que llega del RCD Mallorca. En el día de hoy ha cerrado la contratación de Miguel Rubio, procedente del Getafe CF. El central de 23 años llega cedido a la ciudad castellana después de pasar las dos últimas temporadas a préstamo en el filial del Real Valladolid. Con esta contratación, el club blanquinegro puede dar por cerrada su parcela defensiva, ya que cuenta con los suficientes efectivos.
Natural de Leganés, donde nació en marzo de 1998, se formó deportivamente en la ciudad inmediatamente contigua, Getafe. Con el club azulón comenzaría a quemar etapas, hasta llegar al filial e incluso debutar con el primer equipo. Para la temporada 19/20 sería cedido al CF Fuenlabrada. Con el equipo madrileño tan solo disputaría un partido copero, no siendo alineado en ningún partido de LaLiga Smartbank. En enero, el Getafe lo repescaría, cediéndolo esta vez al Real Valladolid Promesas, filial del equipo pucelano. Finalizaría la temporada allí, y los blanquivioletas solicitarían su cesión para la campaña siguiente.
Con el filial vallisoletano ha completado una gran temporada, siendo uno de los artífices del ascenso del filial a 1ª RFEF. Jugaría además 2 encuentros en Primera División ante las bajas defensivas del primer equipo. En total ha disputado 20 partidos en esta última campaña, anotando 2 goles. Ahora, y tras no tener hueco en el primer equipo getafense, llega a Burgos en busca de minutos en la categoría de plata. Con contrato aún hasta 2023, esta temporada podría significar un antes y un después en su carrera. Ya que le podría catapultar hacía Primera División, o al menos, hacerle ganarse un puesto en el Getafe.
En Miguel Rubio encontramos a un central contundente y fuerte. Es un especialista en el juego aéreo, merced de su 1´91 m de estatura. Su potente zancada le permite frenar a delanteros mucho más rápidos que él. Además, utiliza su cuerpo y sus condiciones físicas para proteger la posición y el balón. Con su llegada, el club blanquinegro cuenta con hasta 4 centrales. La parte positiva de esta competencia es que en plantilla cuentan con dos centrales zurdos y dos centrales diestros. A priori, y después del primer encuentro, el burgalés Michel Zabaco parece el encargado de cubrir el flanco izquierdo por delante de Grego Sierra. A su lado jugó Aitor Córdoba, quien competirá por un puesto en el once con el recién llegado Rubio.