El nuevo jugador para el centro de la zaga perica puede considerarse un refuerzo positivo y experimentado para competir en LaLiga Santander
Hace unas semanas y tras un mercado de fichajes parado en el RCDE Stadium, llegó la primera incorporación. El central catalán Sergi Gómez se convertía en nuevo futbolista del Espanyol, siendo el primer y único fichaje hasta la fecha.
Actúa como central, una posición que, a priori, no era excesivamente necesaria de reforzar en clave perica. No obstante, la realidad ha sido que Sergi fue el primer fichaje del club para la campaña 21 – 22. En un regreso exigente a LaLiga Santander, Rufete y la dirección deportiva vieron necesario apuntalar el centro de la zaga.
Durante las próximas líneas, podréis leer diversos aspectos sobre el juego de Sergi Gómez.
El nuevo central del RCD Espanyol mide 1,85m y es un futbolista que juega en el centro de la zaga. Su pierna buena es la derecha, aunque en el campo prefiere jugar como central izquierdo. Puede adaptarse a cualquiera de los dos lados, por lo que Vicente Moreno podrá escoger.
Una decisión que no será fácil para el de Masanassa, ya que cuenta con más centrales y la competencia para el nuevo jugador es elevada. Deberá ganarse el puesto a lo largo de las semanas y los partidos.
Como cualquier jugador, Sergi Gómez tiene puntos fuertes y débiles. En el sentido más positivo, es un central con buena salida de balón. Además, no tiene problemas al medirse en carrera con los delanteros, puesto que se defiende muy bien corriendo hacia atrás.
Por otra parte, el central del Espanyol cuenta con algunas carencias, como sucede en todos los jugadores. Le cuesta seguir la marca si sale de su zona de confort, por lo que deberá vigilar el hecho de no subir en exceso. Cuenta con problemas en el juego aéreo pese a medir 1,85m y ese es uno de los principales -por no decir el principal- “handicap” de Sergi Gómez. Difícilmente gana duelos por arriba, aunque gracias a su altura y corpulencia se lleva ciertos balones.
Además y como ya se vio en el encuentro ante el Mallorca, puede tomar decisiones erróneas en los 1 para 1. Son aspectos que deberá ir mejorando con el paso de los partidos, pero en los 3 primeros disputados con el Espanyol ha demostrado que puede y debe ser el central titular en el esquema de Vicente Moreno.
Es un jugador muy equilibrado, ya que sus virtudes “tapan” parte de sus defectos. Gracias a ello, no ha sido un jugador que, a lo largo de su carrera, haya destacado por errores flagrantes.
Trayectoria
Una vez vistos los aspectos del juego del nuevo jugador del Espanyol, hay que saber también en que conjuntos ha recalado a lo largo de su carrera deportiva. Empezó jugando en un club cercano a su Arenys de Mar natal, el CE Mataró. Pero en 2006 llegó el Barça y Sergi Gómez recaló en el club azulgrana para jugar en el fútbol base.
Durante su etapa en Barcelona siguió formándose como futbolista, donde destacó especialmente en el filial, que por aquel entonces jugaba en Segunda División. En 2014 dio el salto al Celta y allí fue un miembro de la plantilla muy importante. Llegó a jugar la UEFA Europa League con Berizzo en el banquillo.
Tras varios años en Vigo, salió en el año 2018 para recalar en el Sevilla. Ha estado tres temporadas en el Pizjuán, en las que ha ido de más a menos. Su primer año fue el mejor, pero tanto en el segundo como en el tercero fue eclipsado por una de las parejas de moda: Diego Carlos y Koundé. Ahora, en el Espanyol, buscará volver a ganar minutos y demostrar el nivel que tiene para jugar en Primera División.
En conclusión, se puede hablar de que Sergi Gómez es un central de garantías para el equipo de Vicente Moreno. Podría hacer una buena pareja con Leandro Cabrera en el centro de la zaga, donde el uruguayo ejercería como líder y taparía los defectos del catalán y viceversa. El técnico del Espanyol tiene una nueva pieza para encajar en su particular puzzle.
