El FC Barcelona necesita reemplazar a los capitanes, un nuevo entrenador y que La Masia sea el eje sobre el que girar
El Barça se encuentra en una de las mayores crisis de su historia, tanto económica como deportiva. Como bien dijo ayer Ferrán Reverter, actual CEO del club, “ha sido una gestión nefasta” y lo peor es que no es la anterior directiva, es el vestuario el que está cargando con el peso de su legado. El equipo necesita quitarse esa mochila para poder volver a volar.
Reemplazo de los capitanes
Los capitanes Sergio Busquets, Gerard Piqué, Jordi Alba y Sergi Roberto tienen que echarse a un lado de una vez por todas. O irse del equipo o irse del once titular, pero no pueden seguir siendo intocables, porque no merecen serlo, por mucho que duela en algún caso.
El Barça ha vivido estos años del legado de Guardiola y Luis Enrique, eso es un hecho. El problema es que los jugadores, como casi todo, no son eternos. Tienen un desgaste físico y mental debido al paso de los años, el aumento de las dificultades y la presión a la que se someten. Y más en un club tan exigente como el Barça, por lo menos, antes lo era.
El famoso lema “més que un club” ha ido perdiendo su fuerza con el tiempo, y es que ahora parece que cualquiera sirve para el Barça, cualquiera puede entrar, puede jugar y puede sacarle el dinero, y eso no puede ser. Los capitanes pueden tener valor en el contexto adecuado, pero ese contexto ahora no existe, así que ellos no pueden seguir como antes.
Un nuevo entrenador
Ronald Koeman era el entrenador indicado para hacer una limpieza más que necesaria, pero ahora ya la ha hecho. Muchas gracias Ronald y buena suerte. Eso tiene que decirle Laporta a Koeman lo antes posible porque este Barça ya no hay que limpiarlo, hay que regenerarlo.
Para eso, hace falta alguien con una idea clara, unos conceptos afines al estilo que lleva practicando el Barça hace años y una valentía casi nunca antes vista en el feudo azulgrana. Porque hace falta auténtica valentía para tomar las riendas del equipo en este momento con la esperanza de resurgirlo. Ahora es cuando hay que arriesgarse y tener paciencia. No debería importar el nombre si cumple con esos requisitos.
La Masia, eje principal
La cantera azulgrana tiene que ser el Sol sobre el que gire el FC Barcelona. No tiene que ser un complemento, tiene que ser la prioridad. La Masia tiene que estar por encima de los fichajes en la planificación deportiva. Ha ido perdiendo fuerza en los últimos años, pero ahora se está volviendo a desenpolvar, vuelve a brillar, pero porque les han dado la opoertunidad que muchos otros no han tenido.
En la boca de los aficionados suenan nombres como el conocido Ansu Fati, y ahora también otros como Gavi, el jugador más joven en debutar con la Selección Española; Riqui Puig, Araújo, Eric García, Óscar Mingueza, Nico González, Iñaki Peña, Alejandro Baldé e incluso el desaparecido Álex Collado, pero todos ellos se resumen en una palabra más simple: La Masia. Deberíamos escucharla más y hacerle más caso, porque es la base de todo.
Si el Barça consigue remontar la crisis económica, que nadie sea intocable, contrata a un nuevo entrenador y prioriza La Masia por encima de todo, resurgirá como el ave Fénix. ¿Qué tiene que hacer este Barça para volver a ganar? Muy fácil, ser un nuevo Barça.
