El neerlandés tiene calidad suficiente para convertirse en una pieza clave en los planes de Mourinho y lograr que la Roma consiga títulos
Mourinho quería un equipo competitivo y el director deportivo de la Roma, Thiago Pinto, está haciendo todo lo posible. Con la llegada de Paulo Dybala el ataque queda cubierto, a esperas todavía de una última incorporación como la de Belotti. Mientras en el centro del campo han conseguido la cesión del holandés Georgino Wijnaldum.
El movimiento consiste en un año de cesión con opción de compra, de unos 8 millones de euros aproximadamente. Además el reparto de salario será de 50% para cada club (PSG y As Roma), lo que significa que el conjunto italiano deberá abonar unos 5 millones de euros netos por el sueldo del centrocampista.
Con tan solo una temporada en París, el ex del Liverpool no se ha visto cómodo ni ha conseguido mostrar esa calidad que mostraba en Inglaterra. Además, no disputó la misma cantidad de minutos, ya que en el PSG la competencia es máxima. Pero en Roma no han dudado del holandés y confían en que su juego sea clave para conseguir los objetivos marcados.
Su rol en el centro del campo es parecido al del ya exjugador Sergio Oliveira, que volvió a su club tras el fin de la cesión. Wijnaldum tiene siempre la vista en la faceta ofensiva por lo que su llegada en segunda línea puede ser vital para que los de Mourinho puedan crear oportunidades de gol.
El técnico portugués podría alinearlo junto a un pivote como Cristante o Diawara y otro jugador más ofensivo como Zaniolo. Eso sí, arriba en la mediapunta el jugador estrella Paulo Dybala. Wijnaldum es un centrocampista físico y con velocidad que aportará grandes cosas al equipo de la capital italiana.