El centrocampista del Atlético de Madrid firma mejores actuaciones con la selección española que con su club, el Atlético de Madrid.
Saúl Ñíguez es un futbolista con mucho descaro y un estilo de juego muy particular. Le gusta lucir su calidad, además de llegar constantemente al área rival.
Sin embargo, estas facetas las lleva a cabo con más frecuencia cuando juega con el combinado nacional. En los partidos que disputa como internacional, el ilicitano adquiere un rol de protagonista, con acciones brillantes y una impresionante valentía.
Todo esto, aún así, lo echan de menos los aficionados colchoneros, pues llevan sin ver al mejor Saúl desde el año 2017, en el que deslumbraba tanto en Champions como en el campeonato liguero.
Todo esto se debe, al parecer, a la táctica del Cholo Simeone, la cuál es cada vez más puesta en duda por los seguidores atléticos, debido a tratarse de un planteamiento demasiado defensivo para la plantilla con la que cuenta el técnico rojiblanco.
Ese juego defensivo es el que parece tener a Saúl ligeramente retenido y, por ello, es incapaz de mostrar sus impresionantes cualidades llegadoras, que a veces le hacen asimilarse a un delantero.
En la selección es todo lo contrario. Saúl juega más rápido, con más acierto en los pases, más cerca de la frontal del área y, sobre todo, con más libertad a la hora de llegar a la portería contraria. Todo ello se debe al planteamiento atrevido de “La Roja”, que es, sin duda, mucho más ofensivo que el del Atleti.
Está claro que, cuando Saúl toma los mandos del centro del campo de España, juega con más criterio y confianza, lo que le hace ser mucho más importante y convertirse en un fijo en la lista de Robert Moreno.