El base de Carolina del Norte ha regresado a las canchas tras dos temporadas ausente y busca volver a ser un líder
Este verano John Wall llegó a los Houston Rockets procedente de los Washington Wizards a cambio de Rusell Westbrook. Su estado físico era toda una incógnita tras dos años alejado de las canchas debido a una lesión en el talón izquierdo.
El base norteamericano se lesionó el 29 de diciembre de 2018 y mientras se recuperaba en enero de 2019 sufrió una infección y posterior rotura del tendón de Aquiles. La carrera del número uno del Draft 2010 quedó en el aire.
Pero este verano decidió emigrar en busca de sentirse jugador de nuevo. Los Houston Rockets, que se encuentran en una remodelación de la plantilla, fue su destino. Junto a él llegaron algunos jugadores como Chris Wood desde los Pistons o DeMarcus Cousins tras un largo periodo de lesión.
Tras la salida en la madrugada de ayer mismo de James Harden rumbo a los Nets y la llegada de Víctor Oladipo y Dante Exum a los Rockets, John Wall es el nuevo líder de la franquicia texana. Un equipo que no ha empezado de la mejor manera la temporada y son penúltimos en la Conferencia Oeste.
Pese a todo esto, John Wall ha demostrado estar en buena forma física y se ha adaptado rápido a su nuevo equipo. Ahora, que Harden se fue John Wall deberá llevar el protagonismo del ataque. De momento, el guard afroamericano promedia 18.6 puntos, 4.7 rebotes y 5.1 asistencias por partido.
El jugador formado en la Universidad de Kentucky quiere volver a ser el líder de una franquicia con mucho futuro. Tiene tan solo 27 años y muchos años de carrera por delante. Su objetivo debe ser volver a recuperar la mejor versión de él y de su equipo.
‘Optimus Dime’ ha sido elegido para el All Star cinco temporadas consecutivas hasta su lesión a finales de 2018. Tras años junto a Bradley Beal en busca de llevar a la gloria a los Wizards, ahora se encuentra en otro proyecto ambicioso y de futuro.