En los años 2005 y 2006, Fernando Alonso hizo historia al dar al deporte español los dos únicos mundiales de Formula 1
Hasta el año 2004, la Formula 1 vivía bajo el dominio de Ferrari y Michael Schumacher. Sin embargo, pilotos jóvenes y con futuro buscaban retar a una de las leyendas del motor y arrebatarle el título mundial de pilotos. Estos eran Fernando Alonso, quien pertenecía a Renault y Kimi Raikkonen, quien pilotaba para McLaren Mercedes.
En el año 2001, Fernando Alonso, un joven asturiano, hacía su debut en la Formula 1 y representaba a España en la competición junto a Pedro de la Rosa. Hasta ese momento, la Formula 1 no era muy vista en el país ya que no se le encontraba sentido a 20 coches dando vueltas por un circuito. Además de ello, no tenía emoción debido al dominio del Kaiser.
Pero tras la llegada de Fernando Alonso, todo cambió. La ilusión en España era diferente y tenían un referente al que apoyar en cada fin de semana. Tras el fichaje del asturiano por Renault, su carrera comenzó a crecer a un ritmo agigantado. Con ello, llegaron su primera pole, podio y victoria de toda su carrera deportiva. Ya para el año 2004, el piloto se confirmó como uno de los talentos de la Formula 1 y se ganó con todo el derecho un puesto en el equipo de Renault.
Año 2005: El campeón más joven de la historia
Antes de comenzar la temporada, todo hacía creer que Michael Schumacher volvería a estar en lo más alto sin encontrar rival. Pero sin embargo, ocurrió todo lo contrario. Fernando Alonso, subido en el Renault R25, acabaría haciendo historia para el deporte español.
El comienzo de temporada fue sensacional ya que consiguió 3 de las 4 victorias posibles. Estas fueron en Malasia, Baréin y la más recordada en San Marino en aquel mítico enfrentamiento en el que el asturiano venció al Kaiser. Tras ello, se convirtió en el primer piloto español en liderar un campeonato del mundo de Formula 1.
Con el paso de las carreras, Fernando seguía consiguiendo buenos resultados. Las victorias y los podios seguían sumándose a su palmares y a la historia del deporte español. Pero sin embargo, encontraría otro joven piloto capaz de discutirle el campeonato. El finlandés Kimi Raikkonen era el otro gran y serio candidato a destronar al piloto alemán del Mundial. Mientras tanto, Michael Schumacher no estaba viviendo su mejor temporada a bordo de un Ferrari que no estaba para pelear por el título y su protagonismo había cambiado con respecto a años anteriores.
En ese año, se produjo uno de los conflictos más históricos de la Formula 1. La gran mayoría de escuderías abandonaron sus coches de la pista en la vuelta de formación debido a una polémica con los neumáticos Michelín. Finalmente, acabaría ganando el Kaiser en una de las carreras más lamentables de la historia de la competición.
Tras este escándalo, la normalidad volvió al asfalto. Por una parte, Fernando Alonso alcanzó la cifra de las 6 victorias en toda la temporada. Y por otra parte, el piloto finlandés le seguía la estela muy cerca en el Mundial. Sin embargo, todo cambió cuando el asturiano finalizó el Gran Premio de Alemania en la undécima posición debido a una colisión con el Toyota de Ralf Schumacher.
Encarando la recta final del campeonato, Fernando consiguió varios segundos puestos y buenos tiempos que le hicieron amarrar el título. El 25 de septiembre de 2005, Alonso hizo historia al convertirse en el campeón más joven de la historia tras finalizar tercero el GP de Brasil. Por otra parte, le daba al deporte español el primer título de Formula 1.
Año 2006: Alcanzar la cima y fin a una etapa dorada
Tras el triunfo en el año 2005, Fernando Alonso ya se había convertido en uno de los favoritos para llevarse el título en 2006. Subido en el Renault R26, el piloto español volvería a realizar una sensacional temporada. Sin embargo, volvería Michael Schumacher a cobrar su protagonismo perdido y disputar el campeonato hasta el final con su Ferrari, que esta vez sí, era realmente competitivo.
Como el pasado año, el inicio fue bastante positivo tanto para Alonso como para Renault. En el GP de Australia, el asturiano venció pero, Michael Schumacher haría su declaración y demanda al título de pilotos. Pero sin embargo, la victoria más especial para el español fue en el GP de Barcelona.
Delante de su gente, Fernando Alonso regaló a todos sus seguidores una especial victoria. Pero sin embargo, llegarían los problemas a mitad de temporada. Ferrari denunció a mitad de temporada a Renault por el uso del mass-damper con el objetivo de que a Renault no le diese tiempo a reaccionar.
A su vez, Michael Scumacher seguía recortando distancias a Fernando en el Mundial a base de victorias y abandonos o malos resultados del español. En el GP de Hungría, Alonso fue sancionado en los entrenamientos debido a acciones ilegales. Tras ello, comenzó la carrera en la posición número 15 de la parrilla. Pero sin embargo, bajo la lluvia, consiguió escalar hasta el primer puesto. Pese a ello, un error de los mecánicos en su segunda parada le hizo abandonar la carrera.
Tras el Gran Premio de China, donde el Kaiser finalizó por delante del español, ambos quedaron empatados en el mundial con un total de 116 puntos. En el GP de Japón, ocurrió lo inesperado. A 17 vueltas para el final de la carrera, el coche de la fiabilidad rompía motor y con ello, Fernando Alonso acabó ganando y enterrando las opciones del Kaiser.
En un Gran Premio de Brasil más normal de lo esperado, Fernando Alonso firmaba una segunda posición para ser nuevo campeón del mundo. Tras ello, acabaría abandonando Renault para fichar por McLaren donde no pudo repetir el título Mundial. Desde el año 2006, el deseo de la triple corona siempre estuvo presente pero, tras varios intentos fallidos, nunca llegó.