A falta de conocer el campeón de la NBA, la temporada corona a los equipos modestos por su trabajo constante
En temporada marcada por la pandemia en la NBA, han sido los equipos con un mercado pequeño los que han presentado mejores resultados. Quizá la ausencia de público, menos partidos pero más comprimidos y las abundantes lesiones hayan sido los culpables de que los equipos de grandes superestrellas construidos de la noche a la mañana hayan chocado con los equipos levantados durante años.
Fracaso en Los Ángeles y Brooklyn
Los especialistas en materia NBA de Las Vegas colocaban a Lakers y Nets como los dos grandes favoritos a alzarse con el anillo. Por una parte, nos encontrábamos ante unos vigentes campeones que se habían reforzado durante la agencia libre.
Las llegadas de Montrezl Harrel, Marc Gasol, Dennis Schroder y posteriormente Andre Drummond hacían prever que los Lakers iban camino de convertirse en la franquicia más galardonada de la historia. Finalmente, tras una temporada regular marcada por las lesiones, los Lakers llegaban a los playoff vía play-in cayendo en primera ronda ante Phoenix Suns.
Desde el este estadounidense, nos cruzamos con el fracaso del gran favorito, Brooklyn Nets. Tras esperar un año a la vuelta de Durant, la plantilla volvió a dar un salto de calidad cuantitativo tras la llegada de James Harden. Los de Steve Nash cumplieron en la temporada regular y todo apuntaba a que los Nets se plantarían en las finales sin demasiados problemas. Entonces aparecieron las lesiones, Irving y Harden dejaron solo a Durant, él cual se quedo a unos centímetros de meter a su equipo en las finales de conferencia. Finalmente, los de Nueva York cayeron ante los Bucks en el séptimo partido de las semifinales de conferencia.
Otros dos proyectos fracasados a mencionar son los Clippers y los Sixers. Los angelinos lograron llegar a las finales de conferencia, pero tras la lesión de Kawhi la temporada llegó a su fin. El gran nivel de Paul George o Reggie Jackson fueron insuficientes para vencer a los de Arizona. Por su parte, de nuevo un equipo de Doc Rivers quedaba eliminado por sorpresa. Tras una más que notable temporada regular, Philadelphia caía en semifinales ante los Hawks de Trae Young. Como resultado un muy señalado Ben Simmons y quien sabe si poniendo fin al “Trust the process”.
Premio al trabajo de Suns y Bucks
Dos pequeños mercados como lo son Arizona y Wisconsin han tenido que optar por otras vías para llegar lejos en la NBA. La noche del draft, el trabajo diario y movimientos no tan espectaculares para los focos mediáticos se han impuesto a las grandes ciudades en la temporada postpandémica.
En primer lugar, hay que resaltar el gran trabajo realizado en las oficinas de los Phoenix Suns desde el pasado año. Hace tres años el peor equipo NBA con 19 victorias y hoy se encuentran a dos victorias de levantar su primer anillo. La elección de Booker en el puesto 13, el trabajo de James Jones y de Monty Wiliams desde el 8-0 en la burbuja, y la llegada de Chris Paul como momentos cumbre en el proceso. El base de 36 años llegaba vía traspaso desde Oklahoma y le ha dado a los jóvenes un salto de calidad cuantitativo, llevando al equipo a sus primeras finales desde Charles Barkley.
Por otra parte, los Milwaukee Bucks buscan levantar su segundo anillo después de 50 años y Lew Alcindor (Kareem Abdul-Jabbar) junto a Oscar Robertson. Trabajo elogiable de las oficinas de los Bucks, los cuales han construido un equipo alrededor de un número 15 del draft (Antetokounmpo) y un número 39 traspasado por los Pistons (Middleton). A partir de ahí, traspasos inteligentes y alejados de los focos como Brook Lopez, Jrue Holiday o P.J. Tucker, han llevado a la franquicia de vuelta a lo alto de la NBA en los últimos años, sin olvidar el magnífico trabajo de Budenholzer como entrenador.
Otros pequeños mercados que han sorprendido esta temporada y por los que nos tenemos que quitar el sombrero son Atlanta y Utah. De la mano de Trae Young y John Collins, ambos llegados vía draft, y con pequeñas incorporaciones esta temporada (Bogdanovic, Lou Williams, Gallinari…), los Hawks han caído con honores en finales de conferencia. Por su parte, Utah con Gobert y Mitchell a la cabeza, han sido campeones de la conferencia y oeste y solo les quedan superar los playoff como última frontera.
