Pese a insistir en sus fichajes, Klopp no ha contado con varios de esos jugadores esta temporada
Hoy recordaremos a aquellos jugadores que Jürgen Klopp pidió expresamente su llegada y hoy han sido relegados al banquillo o no cuentan para el entrenador germano. Estos, más concretamente, son Nathaniel Clyne, Naby Keïta, Takumi Minamino y Xherdan Shaqiri.
Nathaniel Clyne
El primero de ellos. Un jugador que cumplía con creces en banda derecha, pero muy malogrado con las lesiones. De hecho, por culpa de las mismas, el jugador tiene los dos pies fuera de Liverpool, cuando su carrera apuntaba hacia otras direcciones. Esta temporada no ha jugado con los “reds” y no tiene pinta de volver a hacerlo, ya que acaba contrato en junio de este año y no renovará.
El jugador quiere cambiar de aires y al club de Anfield tampoco le interesa mantenerlo en la plantilla mucho más tiempo. La pasada temporada casi ni jugó y se fue cedido al Bournemouth, donde no recuperó su forma. Su valor más alto según Transfermarkt fue de 21 millones en 2016 y ahora se estima en 8.
Los reds lo ficharon el 1 de julio del 2015 procedente del Southampton, a cambio de 12,5 millones. Firmó un contrato por cinco años, con la idea de ser un fijo en el once. Las cosas le fueron bien hasta que empezó a lesionarse, o más bien, hasta que apareció Alexander-Arnold. En conclusión, fue un cúmulo de ambas que acabaron por eliminar al londinense del once inicial, en favor del scouser. En su palmarés solo posee la Supercopa de Europa (2019).
Naby Keïta
Quizá el más defendible porque no está tan “despreciado” por Klopp. El guineano fue uno de los elegidos por Klopp para empezar a fraguar el relevo de Milner y Lallana, pero su débil físico ha acabado lastrando su progresión. Aunque el entrenador es cierto que cuenta con él, apenas dispone de apariciones, y con las vinculaciones de Havertz y otros jugadores que ocupan su posición, se ha rumoreado con una cesión o posible traspaso del africano.
De momento es joven y tiene tiempo para recomponerse. Tiene una ventaja, y es que está bien afincado en el vestuario gracias a su amistad con Sadio Mané y aparte, cuando está disponible para jugar con regularidad, cumple su función correctamente. Su valor más alto según Transfermarkt fue de 65 millones, en 2018, cuando estaba en plena forma e incluso estuvo a punto de irse al Barça. El valor estimado ahora es de 33,5.
Proveniente del Leipzig el 1 de julio de 2018 a cambio de 60 millones, portando el dorsal “8”, el mítico de Stevie G. El número, como él mismo dijo, no le pesaba en cuanto a responsabilidad, pero sus expectativas están muy bajas en cuanto a su precio.
Su palmarés incluye 1 UCL (2019), 1 Supercopa de Europa (2019), 1 Mundial de Clubes (2019) y 2 Ligas y Copas de Austria (2015, 2018). Por otra parte, en cuanto a premios individuales, posee uno al Mejor Futbolista de la Temporada del RB Salzburg (2016) y uno al Mejor Guineano del Año (2015).
Takumi Minamino
El nipón fue el único fichaje de Klopp en invierno, y apenas ha participado. Vino para dar descanso y rotar a los atacantes titulares, y más allá de unos minutos ante el Atlético y una discreta participación en Wolverhampton, apenas ha jugado. Es cierto que necesita adaptarse y su período de adaptación se ha visto interrumpido por la pandemia.
Su juventud y polivalencia le convierten en un jugador importante en las rotaciones del teutón, que de momento no se producen. Al tener pocos minutos y una pandemia mundial, su valor se ha resentido, siendo el actual de 10 millones según Transfermarkt, y el más alto de 12,5.
Fichado por 8,5 millones en Año Nuevo, el japonés tiene unas expectativas altas después de su gran primer trimestre con el Salzburgo.
En su palmarés se encuentran 5 Bundesligas Austriacas (2015, 2016, 2017, 2018, 2019) y 4 Copas Austriacas (2015, 2016, 2017, 2019).
Xherdan Shaqiri
Que el suizo juegue tampoco no se entiende. Es un jugador buenísimo que puede jugar hasta de mediocentro y nunca aparece de titular, aunque contra el Barcelona jugó. El resto, es historia, como también jugó contra el Everton y el Manchester United, copando todas las portadas.
El ex-potter es un jugador muy técnico, capaz de resolver partidos debido a su gran disparo lejano y a su gran visión de juego. Klopp puso empeño en su fichaje, pero nada más lejos de la realidad, el helvético no juega con regularidad y se ha rumoreado con una salida al Sevilla.
El Liverpool pagó su cláusula en verano de 2018. 14,7 millones fue el precio, una auténtica ganga para un jugador como él, que cuando juega es una auténtica bestia. Es conocido por sus chilenas y por su gran golpeo a balón parado. Según Transfermarkt, su valor más alto fue de 25 millones, siendo el actual de 16.
Su palmarés es realmente exitoso. Incluye 1 Supercopa Alemana (2012), 2 Supercopas de Europa (2013, 2019), 2 Mundiales de Clubes (2013, 2019), 2 Copas de Suiza (2010, 2012), 3 Ligas Suizas (2010, 2011, 2012), 2 DFB Pokal (2013, 2014), 3 Bundesligas (2013, 2014, 2015) y 2 Champions (2013, 2020). Además de dos premios individuales al Mejor Jugador Suizo del Año (2011, 2012).