El veterano centrocampista llega al club babazorro con el objetivo de volver a ascender a Primera División
Salva Sevilla se ha convertido en el primer refuerzo del Deportivo Alavés desde la llegada de Luis García Plaza al banquillo. Jugador y entrenador ya compartieron club en el Mallorca y buscarán volver a Primera División más pronto que tarde. El futbolista de Berja firma en calidad de agente libre por una temporada en un nuevo reto para él en el fútbol español.
A sus 38 años, Salva Sevilla tendrá mucha veteranía que demostrar en el vestuario babazorro. En todos estos años, ha demostrado un golpeo lejano al alcance de muy pocos en la categoría de plata y nunca se ha privado de aprovechar esta gran virtud. Como no podía ser de otra manera, supone un gran peligro en el balón parado y marca los tiempos del juego a las mil maravillas en su posición de mediocentro. Está por ver que aún le quede fuelle para seguir rindiendo en el fútbol profesional a pesar de su longevidad.
Tras pasar por las categorías inferiores del Poli Ejido, del Sevilla y del Atlético de Madrid, dejó el mundo de los filiales en 2008 al fichar por la UD Salamanca en Segunda División. Después fichó por el Betis, también en la categoría de plata, donde ascendió a Primera y superó el centenar de partidos. Tras ello, estuvo varias temporadas más en Primera con el Espanyol antes de volver a vestir los colores del Mallorca en Segunda B. Con el conjunto bermellón ascendió dos categorías hasta regresar a LaLiga Santander, donde siguió siendo pieza clave del equipo. Ahora, tras descender con el Mallorca, busca un nuevo reto en Segunda, en el Deportivo Alavés.
En total, Salva Sevilla acumula 206 partidos en Segunda y 174 en Primera. Unos números dignos de un jugador icónico del fútbol profesional español. A priori deberá disputar el puesto con jugadores como Tomás Pina, Pere Pons o Toni Moya, aunque aún se espera mucho movimiento en el mercado tanto en llegadas como en salidas. Algo habitual en los equipos recién descendidos como el Alavés.
