Si hablamos de centrocampistas históricos, no podemos dejarnos atrás a Claude Makélélé, el pequeño y potente centrocampista defensivo que militó en PSG, Chelsea y Real Madrid, entre otros.
Claude Makélélé nació en Kinshasa, República Democrática del Congo, (antes Zaire) un 18 de noviembre de 1973, aunque en 1977 se trasladó a las afueras de París con su familia. Su padre fue internacional por Zaire y jugó en la liga belga, donde más tarde él mismo entrenaría.
El joven Claude empezó a hacer sus pinitos en el mundo del fútbol en la categoría de juvenil en el Stade Brestois. Equipo que ahora se encuentra en la Ligue 1.
De las categorías inferiores del Brest, subiría al primer equipo del Sporting Melun. Luego ya volvería al club en el que se formó, para la temporada 90/91, con 17 años.
En el mercado de invierno de 1991, se marchó al filial del Nantes, para disputar allí el resto de la temporada 91/92. En julio de 1992, y ya para disputar la temporada 92/93, subió al primer equipo del conjunto norteño.
Cinco años después, en 1997, se marchó de manera libre al Olympique de Marsella, donde sólo permaneció un año, antes de recalar en España; en el Celta de Vigo, también de manera libre.
Ambos pasos son bastante desconocidos para los que recuerdan, vieron o hablan del francés.
En el año 2000, el Real Madrid pagó 14 millones para hacerse con él. Podemos observar un claro esbozo de la personalidad del jugador, que se negó a entrenar con el conjunto celeste hasta que se resolviera la situación.
Finalmente, el centrocampista acabó en el Bernabéu, ganando la Champions de 2002, además de dos Ligas y una Supercopa de Europa.
En el club blanco se le puso el apodo “Trípode” o “Tres Piernas”, haciendo alusión a sus partes íntimas, las cuales se llegó a revelar que tenían que ser atadas con cinta adhesiva para que no supusieran una molestia para el jugador durante el partido.
En 2003 llegaron los problemas. Makélélé era menospreciado e infravalorado por la directiva.
El Real Madrid compró a David Beckham procedente del Manchester United. Esto llevó a un overbooking en el centro del campo, lo que llevó a Makélélé a pedir un aumento de sueldo, debido a que aportaba muchísimo más de lo que reflejaba su sueldo actual.
Años después, en 2010, Makélélé no se mordió la lengua y habló sobre su salida del Real Madrid. Señaló como principal culpable a Florentino, tal y como corroboraría después Steve McManaman en su autobiografía, criticando al máximo mandatario blanco por las salidas de Del Bosque, Hierro, y el propio Makélélé.
Ante la negativa del Real Madrid, y, el jugador, sientiéndose maltratado, decepcionado y profundamente infravalorado por Florentino Pérez, ejerció medidas de presión para marcharse del Bernabéu. El Chelsea pescó en río revuelto y lo traspasó a sus filas en 2003, a cambio de 20 millones.
En el conjunto londinense permaneció hasta 2008, pero tuvo una anécdota con Ronaldinho en un partido de Champions.
El brasileño estaba haciendo de las suyas en ese partido, hasta que, cuando se paró el juego, Makélélé le dijo: “Más vale que no uses esos trucos de Play Station contra mí para regatearme, o tendré que mandarte al hospital.”
Ya enfocando la recta final de su carrera, fichó por el PSG a coste cero. Volvió a la ciudad de su infancia, y permaneció hasta 2011.
Tras su retirada, entrenó y fue director del KAS Eupen belga, hasta que este verano volvió al Chelsea para ocuparse de la academia juvenil.
