El equipo portugués, en aquel entonces entrenado por un joven José Mourinho, sorprendió al mundo del fútbol conquistando la Champions League.
La 20ª Primeira Liga del Oporto
El Oporto, en aquel entonces contaba en su plantilla con jugadores como Baía, Ricardo Carvalho – escudero de Mourinho, ya que le acompañó en Chelsea y Real Madrid – o Deco, y con un entrenador que empezaría a forjar su leyenda a orillas del Duero. Aquella plantilla hizo frente al SL Benfica y consiguió arrebatarle el título de liga con una diferencia de ¡8 puntos! (82 – 74)
José Mourinho traía a Oporto el 20º título de liga de la entidad, empezando a llamar la atención de los grandes clubes del continente. Meses después, en verano de 2004, el entrenador salía por segunda vez de su país, – ya estuvo en el Barcelona – donde no ha entrenado desde entonces. Se marchó al Chelsea, siendo su primera experiencia en Inglaterra, gestionando una plantilla con un potencial enorme.
A las puertas del triplete: Final de la Taça perdida ante el Benfica
Ya campeón de liga, <<os dragoes>> se enfrentaban al Benfica en la final de la Copa nacional portuguesa. El club blanquiazul se puso 0-1 con gol del brasileño Derlei justo en la reanudación del partido. El club lisboeta empató en el 58´, por medio del griego Takis Fyssas. El marcador no se movió en el tiempo reglamentario, así que se acudió a la prórroga, donde apareció Simão Sabrosa en el 104´ para dar la victoria a su equipo, colocando en el electrónico el 2-1 final.
La consecución del milagro: El Oporto gana la Champions
Fase de grupos
El Oporto fue encuadrado en el Grupo F con el Real Madrid, Olympique de Marsella y Partizan de Belgrado. Pasó como segundo, con 11 puntos, tras el Real Madrid, con 14, y por delante del club francés, que se marchó a Europa League. El club serbio cayó eliminado.
Octavos de final: El milagro empezó en Manchester
En los octavos de final, los portugueses fueron encuadrados con el Manchester United, campeón cinco años antes. El partido de ida fue jugado en Portugal, y el club de Mourinho ganó 2-1. En la vuelta en Manchester, el Oporto se marchó al descanso perdiendo 1-0, por lo que estaba eliminado. Pero el fútbol no quiso que se quedasen ahí, y empataron a uno, accediendo a cuartos de final por un global de 3-2 y sorprendiendo a todo el mundo del balompié.
Cuartos de final: Au revoir, Lyon!
José Mourinho no estaba dispuesto a dejar de realizar hazañas imposibles, y permitió seguir soñando a toda una ciudad – y probablemente a gran parte de su país – consiguiendo un billete en cuartos de final ¿El rival?: El Olympique de Lyon, que también acabó eliminado por un global de 4-2. En la ida en Portugal, el club local dejó el partido encarrilado por un resultado de 2-0. El club francés intentó la épica en Gerland, pero el resultado final (2-2) les acabó aupando de la competición.
Semifinales: La sorpresa del Dépor
En semifinales, el Oporto se enfrentó a otro club que dio la sorpresa: El Deportivo de la Coruña. En una semifinal disputadísima, el club gallego no marcó en la ida en Portugal pero consiguió no encajar. Todo quedaba pendiente para la vuelta, donde el fútbol volvió a dejar claro que está dispuesto a que ocurran milagros. En Riazor, el club portugués se clasificó para la final con un eficiente 0-1.
La gran final de Gelsenkirchen: Otro «underdog», el Mónaco
El Mónaco venía de eliminar al Chelsea en semifinales por un global de 5-3, pero en cuartos de final realizó una machada: Perdió 4-2 en el Bernabéu, pero remontó 3-1 en el Estadio Louis II, eliminando al club blanco con gol del ex-madridista Morientes.
Una final atípica debido a la calidad de los equipos, que no eran favoritos, y, sin embargo, el planeta fútbol estaba pendiente de ellos. En Gelsenkirchen, el Oporto se consumó como uno de los mayores «underdogs» de la historia del fútbol, al ganar 3-0 al conjunto francés con goles de Carlos Alberto, Deco y Alenichev.